El sabado se firmo en Doha un marco de acuerdo entre el gobierno de la Republica Democratica del Congo y el grupo rebelde Movimiento 23 de Marzo (M23). Mediaron Qatar y Estados Unidos con el objetivo de establecer las bases para negociaciones destinadas a poner fin a uno de los conflictos armados mas prolongados de Africa central.
La ceremonia conto con delegados de ambas partes y representantes de los gobiernos de Qatar y Estados Unidos. Este encuentro siguio a varias rondas diplomaticas iniciadas en abril en territorio catari.
El documento acordado contiene ocho medidas y ya hay avances en dos de ellas: la liberacion de personas detenidas y la creacion de un mecanismo para monitorear el alto el fuego.
Las seis medidas restantes, que se refieren al restablecimiento de la autoridad gubernamental en zonas controladas por los rebeldes, la llegada de ayuda internacional y el retorno de la poblacion desplazada, seran objeto de negociaciones posteriores.
El enviado especial de Estados Unidos para la region, Massad Boulos, dijo a Reuters que el texto representa un paso importante en un proceso que requiere negociaciones progresivas y cuya implementacion no sera inmediata.
“La gente esperaba ver resultados rapidos, pero esto demanda pasos sucesivos”, afirmo Boulos durante el anuncio en Doha. Los mediadores senalaron que el cronograma preve dos semanas para debatir los puntos pendientes.
Las negociaciones se desarrollan en un contexto de reciente escalada de violencia tras la ofensiva rebelde que permitio a M23 ocupar Goma y Bukavu, dos importantes centros urbanos del este del Congo. La presencia de numerosos grupos armados y la disputa por recursos minerales han convertido la region en una de las mas complejas del continente.
En 2024 la violencia continuo: persistieron enfrentamientos entre el M23 y las fuerzas estatales y aumentaron los ataques de otras bandas armadas. Entre estos incidentes figura el asesinato de civiles en Norte de Kivu, atribuido a milicianos vinculados a ISIS.
El ministro qatari Mohammed bin Abdulaziz Al-Khulaifi dijo a los asistentes que “la paz no se impone por la fuerza, se construye sobre la confianza y el compromiso genuino”.
Los acuerdos alcanzados en Doha no implican el cese inmediato de los combates ni un cambio automatico en el control territorial; estos aspectos dependeran del progreso de las futuras negociaciones y de un acuerdo definitivo, advirtio el representante del M23, Benjamin Mbonimpa, en declaraciones a AP.
Las tensiones historicas entre el gobierno de Kinshasa y los lideres rebeldes se han agravado tras denuncias mutuas de incumplimiento de pactos anteriores. El exfuncionario estadounidense para Africa Tibor Nagy, entrevistado por Reuters, sostuvo que abordar el conflicto exige acciones sostenidas y no soluciones rapidas.
(Con informacion de AP y Reuters)
