Majo Martino volvio a referirse a su renuncia sorpresiva a La noche es nuestra, el ciclo de la TV Publica que iba a conducir junto a Diego Ramos, y explico con claridad lo que ocurrio detras de camaras. Invitada al programa Almorzando con Juana (Eltrece), detallo los motivos que la llevaron a bajarse semanas antes del debut, senalando principalmente incomodidad y una relacion de trabajo que, segun ella, nunca llego a funcionar.
“En un momento de mi vida dije: ‘Donde no la paso bien, no me quedo'”, dijo la periodista, y aclaro que su salida no respondio al formato ni al contenido del ciclo, sino a la dinamica que se genero en la conduccion con su companero.
Al ser consultada por Juana Viale sobre que habia fallado -si la produccion, el tono o la interaccion en camara-, Martino fue directa: el problema fue “la dupla que se armo”. Senalo que el lenguaje del programa le parecia acertado, pero que cuando son dos conductores debe haber espacio para ambos, algo que no se dio.
Recordo tambien senales de incomodidad por parte de Ramos: dijo que al parecer el queria conducir solo o eso le habian prometido, y que ya estaba de mal humor cuando hicieron la promo. “Y yo de florero tampoco iba a estar”, afirmo. Evito un ataque personal, aunque explico que la falta de reciprocidad en camara la hacia sentirse anulada: “Tenes que tener empatia para conectar con tu companero. El arrancaba y no me…”, y la frase fue completada por Viale: “Diego habla, habla, habla…”. Martino aclaro que no queria hablar mal de Ramos porque le tiene aprecio, pero conto que la situacion le afectaba el animo: “Me iba a mi casa con una angustia que no merecia tener”.
Tambien critico la actuacion de la produccion, que segun ella no ayudo a ordenar el funcionamiento del duo. Relato que recibio indicaciones contradictorias sobre su rol: primero le dijeron que los conductores serian ambos, y luego le aclararon que Ramos queria abrir y cerrar el programa. Dijo no tener problemas de ego, pero reclamo una division de tareas clara y expreso verguenza por el papel que le toco desempenar. Finalmente, decidio irse y relato que sintio “una liberacion total”.
Por su parte, dias antes Diego Ramos habia dicho que la renuncia de Martino no lo sorprendio: reconocio que ella no se sintio comoda y opto por bajarse. Menciono ademas que un viaje previo de Martino complico el arranque y que hubo errores de comunicacion sobre el formato. Aun asi, aseguro que la relacion personal entre ambos estaba bien y que habia intentado revertir la situacion antes de su salida.
Martino confirmo que Ramos le envio audios, se disculpo y le dijo que valora la relacion entre ambos; ella afirmo creerle y lo definio como “una buena persona”. Explico que, aunque en otros proyectos podria haber reclamado su lugar, en este caso el malestar era demasiado grande y prefirio priorizar su bienestar: “Donde no la paso bien, no me quedo”. Su renuncia marco el fin de una dupla que nunca llego a consolidarse frente a camara, y aunque el vinculo personal permanece, Martino dejo claro que su espacio profesional y su bienestar no son negociables.
