La Corte Suprema de Justicia de la Nacion confirmo la condena de Romina Picolotti, quien fue secretaria de Ambiente y Desarrollo Sustentable entre 2006 y 2007. Fue sentenciada a tres anos de prision en suspenso por defraudacion en perjuicio de la administracion publica por utilizar fondos del organismo en gastos personales y regalos para familiares.
Picolotti, que siguio el juicio desde Miami desde 2021 -donde reside desde hace una decada-, ademas recibio la inhabilitacion perpetua para ejercer cargos publicos.
La decision fue adoptada por los jueces Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz y Ricardo Lorenzetti, que rechazaron un recurso de la defensa por considerarlo “extemporaneo”.
Durante el proceso la ex funcionaria nego haber cometido delitos y sostuvo su inocencia; en la etapa de juicio expreso objeciones a las imputaciones y cuestiono algunos cargos con comentarios personales sobre sus habitos alimentarios.
El Tribunal Oral Federal N 6 tambien impuso la obligacion de devolver 6.941.170 pesos, monto actualizado hasta la fecha de la sentencia.
Pasajes aereos, comidas y otros gastos personales
La investigacion se tramito en el juzgado federal de Maria Romilda Servini, con la intervencion del fiscal Guillermo Marijuan. En el debate publico se acredito que, mientras estuvo en funciones, Picolotti habria utilizado con frecuencia fondos del organismo para atender gastos privados y costear lujos para ella y personas de su entorno.
Entre los gastos considerados ilegales se detallaron 36.005 pesos para comidas y bienes personales (incluyendo parrillas, desayunos, restaurantes de sushi, flores, productos de farmacia y alimento balanceado para perros); 167.171 pesos en pasajes aereos para familiares y allegados; y 91.511 pesos en vuelos charter privados, sumando 294.687 pesos a valores de 2007.
Tambien se senalaron gastos como lavado de autos, cargas de combustible, servicios de limpieza y compras de sahumerios y piedras aromaticas; uno de los tickets aportados correspondia a la cadena Hooters.
El fiscal general Diego Luciani sostuvo en su alegato que hubo un manejo irregular de los fondos publicos y constituyo un fraude en el ejercicio de la funcion.
La Fiscalia afirmo que se pagaron comidas casi a diario sin justificacion, pasajes para familiares y amigos sin vinculacion con la funcion publica y costosos vuelos charter; solicito penas que oscilaron entre tres y nueve anos de prision.
Los jueces Sabrina Namer, Rodrigo Gimenez Uriburu y Guillermo Costabel impusieron la condena de tres anos de prision en suspenso y la obligacion de presentarse mensualmente en el consulado argentino en Miami.
En 2023 la Sala I de la Camara Federal de Casacion Penal reviso la causa y confirmo la sentencia, concluyendo que Picolotti utilizo de manera irregular y fraudulenta fondos publicos asignados a su reparticion para solventar gastos personales y de terceros, provocando un perjuicio economico al Estado.
Tras ese fallo la defensa presento una queja ante la Corte Suprema, que finalmente la rechazo, dejando firme la condena por corrupcion contra Picolotti.
