La Fuerza Espacial de Estados Unidos adjudico contratos iniciales a varias empresas del sector aeroespacial y tecnologico -entre ellas Northrop Grumman, True Anomaly, Lockheed Martin y Anduril- para desarrollar prototipos de interceptores espaciales dentro de un sistema avanzado de defensa antimisiles.
El programa, denominado Golden Dome, tiene como objetivo desplegar interceptores capaces de neutralizar misiles enemigos en los primeros minutos de vuelo, coordinados mediante una red que combina estaciones terrestres y satelites.
Cada contrato inicial para un prototipo ronda los USD 120,000, aunque el monto total del programa no ha sido divulgado. La Fuerza Espacial indico que no esta obligada a publicar detalles de contratos menores a USD 9 millones.
Las empresas seleccionadas buscan posicionarse para fases posteriores de produccion en serie, que el Departamento de Defensa estima podrian requerir inversiones anuales entre USD 1,800 y USD 3,400 millones.
El programa utiliza una estructura de premios escalonados: los incentivos aumentan tras superar pruebas en orbita, con un primer premio de USD 125 millones y un quinto de USD 40 millones. Se solicita el desarrollo de al menos cuatro variantes de interceptores, aunque hay propuestas para reducirlas a tres categorias tecnologicas.
La adjudicacion y financiacion se realiza bajo acuerdos OTA, que brindan al Departamento de Defensa mayor flexibilidad administrativa y permiten mantener confidencialidad sobre cifras y beneficiarios. El desarrollo se organizara en bloques tematicos o “pools” dirigidos a variantes tecnicas especificas, y solo los que aprueben las pruebas orbitales podran acceder a contratos de produccion masiva.
El proyecto cobro mayor visibilidad tras una orden ejecutiva del presidente Donald Trump, quien manifesto su apoyo y describio el alto costo potencial de la iniciativa durante un acto en la Casa Blanca en mayo.
El plazo estimado para desplegar la red a nivel nacional es de aproximadamente tres anos, aunque expertos advierten que los requisitos tecnicos podrian alterar ese cronograma.
Varias companias, desde grandes consorcios hasta startups, ya han iniciado ensayos: Apex Space planea lanzar su prototipo “Project Shadow” el proximo verano, Lockheed Martin proyecta su primera prueba para 2028 y Northrop Grumman realiza pruebas terrestres.
Segun la informacion recopilada por Reuters, los contratos iniciales funcionaran como plataforma de evaluacion; unicamente los fabricantes que superen las pruebas orbitales accederan a la etapa siguiente, donde se adjudicaran los contratos de produccion en masa. Este enfoque busca mantener incentivos para soluciones innovadoras y operativas en el corto plazo.
De este modo, la Fuerza Espacial, el Pentagono y la industria privada avanzan en la creacion de un sistema que podria transformar la defensa contra amenazas misilisticas, en un contexto de estrategias reservadas, asignacion de fondos y tecnologias en rapida evolucion.
(Con informacion de Reuters)
