Tres anos despues de la recuperacion de la ciudad en una contraofensiva ucraniana, Kherson, en el sur, vive entre la esperanza y la angustia. Sus habitantes pasan gran parte del dia en sus casas o en refugios subterraneos debido a los ataques diarios de drones y artilleria rusos dirigidos contra areas civiles.
“Cada vez que salimos a trabajar y regresamos, rezamos”, declaro a EFE Emilia Jutkovska, psicologa y una de las aproximadamente 70.000 personas que siguen viviendo en Kherson, una cifra que equivale a cerca de una cuarta parte de la poblacion anterior a la invasion rusa.
Jutkovska y su marido estuvieron entre los miles que huyeron cuando los tanques rusos entraron en marzo de 2022. Volvieron poco despues de la liberacion, el 11 de noviembre de ese ano, y permanecen en la ciudad a pesar de lo que los residentes describen como una constante “caza con drones” desde las posiciones rusas situadas en la orilla opuesta del rio Dnieper.
Amenaza de ataque permanente
“Nos hemos acostumbrado al zumbido continuo de los drones”, dijo Jutkovska, que trabaja en dos hospitales y atiende con regularidad a personas heridas por estos ataques, los cuales dejan cada mes decenas de muertos y heridos.
“Hay heridos todos los dias: por explosiones, por metralla… El efecto psicologico es muy profundo. Hace unos dias una paciente sufrio una reaccion de estres agudo tras un bombardeo que alcanzo viviendas cercanas; al dia siguiente su corazon colapso”, relato.
El dia de la liberacion, las principales calles de Kherson se llenaron de vecinos que recibieron a los soldados con jubilo, ondeando banderas ucranianas que habian ocultado durante los meses de ocupacion.
Hoy el edificio de la administracion regional esta parcialmente destruido y las calles -antes concurridas- permanecen vacias, sobre todo despues de las tres de la tarde, cuando el transporte publico deja de funcionar.
Las tardes transcurren en casas con las luces apagadas y las cortinas cerradas “para que los drones no puedan ver el interior”, comento Jutkovska con un humor cargado de amargura.
Bajo tierra
“A veces nos sentimos como topos”, anadio. Aun asi, su familia sigue elaborando vino con la cosecha local y, cuando el clima y la seguridad lo permiten, celebran cenas en el jardin.
La vida se desarrolla cada vez mas bajo tierra: escuelas, centros comunitarios y hospitales acondicionan sotanos o construyen nuevos refugios subterraneos para proteger a los mas vulnerables y mantener cierta normalidad.
Uno de estos refugios infantiles fue visitado recientemente por la actriz Angelina Jolie, lo que supuso un breve foco de atencion internacional que los habitantes esperan que se traduzca en mayor apoyo para frenar los ataques.
En otro espacio subterraneo, el Centro Cultural Oleksandr Menshov Kherson -nombrado en memoria de un escritor local fallecido en combate- exhibe dibujos infantiles de lugares emblematicos de la ciudad para conmemorar el tercer aniversario de la liberacion.
“Algunos de los lugares representados estan muy danados y otros resultan inaccesibles”, explico Oksana Pogomi, directora del centro.
Pogomi expreso profunda gratitud hacia los soldados que liberaron la ciudad y hacia los vecinos. “Lo mejor que podemos hacer ahora es apoyar nuestra defensa”, dijo a EFE, y senalo que muchos locales contribuyen con donaciones o prestan ayuda de distintas maneras.
Esperanza pese a la amenaza
El martes, el presidente Volodimir Zelensky visito Kherson y agradecio a los soldados “que lucharon por Kherson y que hoy defienden esta ciudad y la vida de su gente”.
Tras recorrer un hospital y un refugio infantil subterraneo, Zelensky anuncio que las Fuerzas de Sistemas No Tripulados de Ucrania han recibido instrucciones para reforzar la defensa frente al acoso diario de drones rusos.
No se han detallado las medidas, pero se espera que incluyan el fortalecimiento de capacidades de guerra electronica para interceptar drones y localizar a los operadores situados en la orilla opuesta del rio.
“Todos esperamos que los bombardeos disminuyan y, finalmente, cesen”, afirmo Jutkovska, que reconocio el temor de muchos residentes a que Kherson pueda sufrir un destino similar al de la ciudad portuaria de Mariupol, devastada durante el asedio ruso de la primavera de 2022.
Sin embargo, anadio: “No perdemos la esperanza. Tras miles de ventanas rotas y hogares destruidos, el valiente pueblo de Kherson sigue esperando la victoria”.
(Con informacion de EFE)
