La Municipalidad de Escobar avanzó en una iniciativa ambiental que se venía trabajando desde hace semanas: el intendente Ariel Sujarchuk informó que envió al Concejo Deliberante un proyecto de ordenanza para regular el arbolado público en todo el distrito. Según explicó, la propuesta se elaboró incorporando sugerencias de vecinos de la ruta 26 y barrios cercanos.
En un video difundido el viernes, el jefe comunal anunció: «Estoy firmando un proyecto de arbolado público, un proyecto de ordenanza que voy a estar enviando al Concejo Deliberante hoy mismo». Señaló que la iniciativa surgió por la participación de residentes comprometidos, principalmente del corredor que une Ingeniero Maschwitz con Maquinista Savio.
El intendente aclaró que muchos de esos vecinos «no adhieren a la gestión, pero sí participan activamente, quieren el lugar y aportan buenas ideas», y destacó que el proceso se enriqueció con distintos aportes. Remarcó la importancia de escuchar a todos los actores interesados en mejorar el partido de Escobar y proteger el ambiente.
Desde el Ejecutivo indicaron que el proyecto se ajusta a la ley provincial 12.276, que impulsa políticas de forestación, conservación y la creación de un consejo asesor para preservar los árboles en espacios públicos.
El expediente será tratado por el Concejo Deliberante para formalizar las acciones y consolidar las contribuciones ciudadanas. No hay fecha confirmada para la votación, pero se estima que podría abordarse antes de fin de año, una vez que asuman los concejales electos en septiembre.
Fechado el 27 de noviembre y compuesto por 38 artículos, el proyecto declara al arbolado urbano y periurbano como patrimonio natural del distrito. Prohíbe la poda, extracción o cualquier daño sin la autorización municipal, y reconoce funciones ambientales de los árboles como mejora de la calidad del aire, regulación térmica, aumento de la biodiversidad, retención de agua de lluvia y el aporte a espacios públicos más agradables.
La Secretaría de Planificación Territorial y Espacio Público será la responsable técnica de la plantación, el mantenimiento, la conservación y la reposición. La propuesta incluye un Plan de Forestación anual y un Plan Regulador que defina especies recomendadas, zonas de intervención y criterios técnicos. Además contempla la creación de un Consejo del Arbolado Público y programas educativos para involucrar a escuelas, ONGs e instituciones, junto con obligaciones específicas para frentistas y empresas.
El proyecto también prevé sanciones para quienes dañen o talen ejemplares sin permiso, la obligación de reponer los árboles afectados y la asignación de partidas presupuestarias para ejecutar las medidas previstas.


