El presidente ucraniano Volodimir Zelensky anuncio el inicio de una reforma estructural en las principales empresas publicas del sector energetico de Ucrania, entre ellas Energoatom y otros operadores estatales, tras un escandalo de corrupcion que ha sacudido al pais y motivado la renuncia de dos ministros en un contexto de presion interna e internacional y mientras una nueva ola de ataques rusos dejo a millones sin electricidad.
Zelensky informo via redes sociales que ya se puso en marcha el proceso de renovacion en el sector energetico. Indico que en el plazo de una semana se conformara un nuevo consejo de supervision en Energoatom y que la reforma se extendera a otras companias estatales, como el operador hidroelectrico nacional y las entidades responsables de la extraccion y el transporte de gas. Anadio que se realizaran auditorias financieras integrales y se procedera a la sustitucion de directivos y representantes estatales en sus organos de direccion.
El escandalo se desato tras una investigacion divulgada por la Oficina Nacional Anticorrupcion de Ucrania (NABU), que revelo un sistema criminal que, segun la entidad, habria desviado alrededor de 100 millones de dolares del sector energetico.
La pesquisa motivo la destitucion inmediata y las renuncias de los ministros de Justicia y de Energia, cuyos nombres aparecieron vinculados al caso. Zelensky subrayo que cualquier irregularidad detectada recibira “una respuesta rapida y justa” y ordeno una comunicacion constante y constructiva entre autoridades gubernamentales y fuerzas de seguridad.
El centro de la investigacion es Tymur Mindich, un empresario con vinculos en el mundo del entretenimiento y antiguo socio cercano al presidente. Segun una investigacion de 15 meses divulgada por la NABU y la Oficina del Fiscal Especializado en Anticorrupcion (SAPO), Mindich habria sido el artifice de la operacion: se le atribuye el control de una red de colaboradores que exigian sobornos a contratistas de Energoatom, de hasta el 15% para facilitar contratos y eliminar obstaculos administrativos, y el desvio de fondos a traves de empresas pantalla.
Mindich se encuentra actualmente fuera del pais, por lo que cualquier proceso penal en su contra probablemente se desarrolle en ausencia. Ademas de su actividad en la industria audiovisual, mantenia relaciones con figuras publicas, entre ellas Zelensky y el oligarca Ihor Kolomoysky. Antes del escandalo fue senalado como actor clave en la reestructuracion de empresas vinculadas a Kolomoysky y habia ampliado sus intereses a sectores agricolas, bancarios y energeticos.
Sus criticos sostienen que la influencia de Mindich fue posible por su cercania al entorno presidencial y reclaman responsabilidades a niveles superiores del Ejecutivo. La diputada opositora Inna Sovsun pidio una investigacion exhaustiva y sin obstaculos, mientras el partido Solidaridad Europea de Petro Poroshenko exigio la dimision del Consejo de Ministros y la formacion de una nueva coalicion. Organizaciones de la sociedad civil tambien pidieron al presidente reforzar la transparencia y apoyar a las instituciones anticorrupcion.
El caso ha tenido un fuerte impacto en la opinion publica. El sociologo Anton Grushetski, del Instituto Internacional de Sociologia de Kiev, senalo que el hallazgo provoco “gran indignacion”, en particular porque muchos ciudadanos afrontan cortes prolongados de electricidad. Tambien apunto que el dano politico para Zelensky podria moderarse si mantiene un respaldo claro a las investigaciones. Hasta ahora, el presidente exigio la renuncia de los dos ministros implicados e impuso sanciones contra Mindich.
Algunos analistas consideran que la respuesta gubernamental -permitir el avance de la investigacion y tomar medidas contra antiguos allegados- refuerza el funcionamiento democratico en Ucrania, incluso en un contexto de guerra. La determinacion ciudadana para resistir la agresion rusa no parece haberse debilitado, aunque el caso evidencia desafios persistentes en materia de integridad publica y gobernabilidad.
(Con informacion de AFP, AP y EFE)


