En el acto por el 90 aniversario de la Delegacion de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA), el presidente Javier Milei planteo una postura de “tolerancia cero” frente al antisemitismo y reitero el compromiso de Argentina con los valores judeocristianos y la cooperacion internacional en la lucha contra el terrorismo. El encuentro, encabezado por el titular de la DAIA, Mauro Berenstein, sirvio para que el mandatario estableciera un paralelo entre la situacion de las comunidades judias tras el 7 de octubre y los desafios morales que, segun su criterio, afronta la sociedad argentina.
El presidente recibio una distincion entregada por Mauro Berenstein, en un acto en el que estuvieron presentes el canciller de Israel, Gideon Sa’ar, y el canciller argentino, Pablo Quirno.
Milei enfatizo desde el inicio la gravedad de los hostigamientos que, dijo, sufren las comunidades judias a nivel global y en la Argentina desde los ataques del 7 de octubre. Senalo una escalada de insultos, amenazas y actos de vandalismo contra instituciones educativas judias y afirmo que ese odio “poco tiene que ver con lo que pasa en Medio Oriente”, subrayando que el pais aplica “tolerancia cero con el antisemitismo en el marco de la ley vigente”.
Anuncio ademas que Argentina asumira el proximo ano la presidencia de la Alianza Internacional para el Recuerdo del Holocausto (IHRA), lo que, segun el, refuerza el compromiso nacional en la materia. Destaco tambien la firma reciente de un memorando en defensa de la libertad y la democracia durante su visita a Israel y contrasto esa politica con gestiones anteriores, afirmando que mientras otros gobiernos habrian pactado con Iran para encubrir atentados en suelo argentino, su administracion pacta con Israel para combatir el terrorismo y el antisemitismo.
Segun Milei, el memorando busca no solo estrechar la relacion bilateral con Israel sino fomentar la cooperacion regional en torno a la libertad y la lucha contra el terrorismo. Anuncio la promocion de los llamados “acuerdos de Isaac”, inspirados en los acuerdos de Abraham, con el proposito de profundizar los vinculos entre Israel y America Latina, impulsar la cooperacion en sectores estrategicos y consolidar lazos diplomaticos, y afirmo que Argentina sera pionera en su defensa junto con Estados Unidos.
El presidente califico el ataque del 7 de octubre como un punto de inflexion de alcance global, y sostuvo que no afecto solo a Israel o a la comunidad judia sino a Occidente en general. Describio ese ataque como un acto de una brutalidad sin precedentes recientes y afirmo que Israel enfrenta a un enemigo que, en su opinion, no es “razonable” sino con voluntad y capacidad genocida.
Al referirse al conflicto tras dos anos, atribuyo la liberacion de rehenes, entre ellos los argentinos David Cunio, Ariel Cunio y Eitan Horn, a la valentia de los soldados israelies y al apoyo del expresidente Donald Trump, y expreso agradecimiento por ese desenlace.
El discurso derivo hacia una reflexion sobre la importancia de los valores morales en la vida publica y economica. Milei sostuvo que la distincion entre el bien y el mal se ha erosionado desde el poder, lo que, segun el, desoriento a la sociedad argentina. Critico la confusion entre caridad y redistribucion, denunciando que la politica redistributiva convierte al pobre en dependiente del Estado y perjudica al trabajador honesto, y vinculo la decadencia economica con el abandono de los valores judeocristianos, que afirmo son la base del crecimiento y la defensa de la propiedad.
Finalmente, presento a Israel como un modelo de prosperidad basado en el esfuerzo individual y la proteccion de la propiedad privada, recordando su transformacion en menos de 80 anos de un territorio desertico a un centro de desarrollo. Para Milei, apoyar a Israel equivale a respaldar valores que, dijo, en otro momento hicieron grande a la Argentina y que, al haberse abandonado, habrian contribuido a su declive.
