En el centro de Queensland, investigadores identificaron los huevos fosiles de cocodrilo mas antiguos hallados en Australia, con una antiguedad aproximada de 55 millones de anos. Estos restos, encontrados en el terreno de un ganadero en Murgon, pertenecen a un grupo extinto de reptiles conocido como mekosuquinos.
El estudio, publicado en noviembre de 2025, aporta nuevos datos sobre la evolucion, la reproduccion y la adaptacion de estos animales en los ecosistemas australianos primitivos, segun informo Smithsonian Magazine.
El equipo estuvo dirigido por Mike Archer, paleontologo de la Universidad de Nueva Gales del Sur (UNSW), y conto con la colaboracion de Xavier Panades I Blas, del Instituto Catalan de Paleontologia Miquel Crusafont, y Michael Stein, paleoecologo de la UNSW.
Los cientificos analizaron fragmentos de cascara de huevo recuperados en uno de los yacimientos fosiles mas antiguos de Australia, lo que permitio reconstruir aspectos clave del comportamiento y la biologia de los mekosuquinos.
Este grupo habito las aguas continentales australianas durante el Paleoceno y desarrollo rasgos que los diferencian notablemente de los cocodrilos actuales.
Mekosuquinos: cocodrilos semi-arboricolas y su comportamiento distintivo
Una de las hipotesis mas llamativas es que algunos mekosuquinos llevaban una vida parcialmente arboricola. Archer dijo a Smithsonian Magazine que, aunque resulte sorprendente imaginar cocodrilos que acechan desde los arboles, la evidencia sugiere que se situaban en altura para capturar presas.
“Parece que pasaban tiempo en los arboles y probablemente saltaban sobre sus presas. Estos cocodrilos inusuales no se comportaban como los actuales; no permanecian inmoviles en el agua”, explico Archer. Esa estrategia de caza, comparable a la de un leopardo, constituye una adaptacion poco habitual entre los cocodrilos.
Los huevos fosiles analizados probablemente pertenecieron a un pariente temprano del genero Kambara, no a los llamados “cocodrilos que cazaban desde los arboles”. El hallazgo evidencia la variedad de comportamientos y nichos ecologicos que ocuparon los mekosuquinos.
Stein senalo que ejemplares de Kambara podian superar 1,8 metros y se alimentaban principalmente de peces y tortugas de caparazon blando. La presencia de estos reptiles en Murgon muestra la complejidad de los ecosistemas australianos hace 55 millones de anos.
La importancia del yacimiento de Murgon
El sitio donde se hallaron los fragmentos de cascara permite comprender mejor el entorno ecologico de la epoca. Murgon es uno de los afloramientos fosiles mas antiguos del continente y ayuda a reconstruir paisajes de cuando Australia formaba parte de un supercontinente con Sudamerica y la Antartida.
El analisis microestructural y geoquimico de las cascaras indica que los cocodrilos ponian sus huevos en los margenes de lagos temporales, adaptando su reproduccion a un entorno sometido a cambios periodicos. Panades I Blas comento a Smithsonian Magazine que estos fosiles conservan senales que senalan no solo que animales los pusieron, sino tambien donde anidaban y como se reproducian.
La evidencia sugiere que los nidos experimentaban periodos secos, vinculados a la naturaleza efimera de los humedales boscosos de Murgon. Stein indico que este patron apunta a la existencia de lagos poco profundos y temporales, visitados posiblemente una vez al ano para la puesta de huevos.
Tras la temporada reproductiva, los cocodrilos se retiraban a los bosques cercanos. Archer explico que, despues de la puesta, estos reptiles probablemente regresaban al follaje para cazar presas desprevenidas. El estudio muestra una mayor flexibilidad comportamental que la observada en los cocodrilos modernos.
Adaptacion y diversidad de los cocodrilos prehistoricos
El trabajo sobre los mekosuquinos aporta informacion sobre los desafios que enfrentaron estas especies a lo largo del tiempo. La expansion de zonas aridas en el interior australiano redujo sus habitats y aumento la competencia por recursos hidricos y alimentarios.
Matthew McCurry, paleontologo del Museo Australiano, destaco en Smithsonian Magazine que estos antiguos cocodrilos “hacian mucho mas de lo que hacen en los ecosistemas modernos”, subrayando su capacidad de adaptacion y diversificacion.
El descubrimiento de los huevos fosiles en Queensland ofrece una ventana al pasado remoto de Australia y a la evolucion de sus reptiles. Aunque los mekosuquinos dominaron ecosistemas acuaticos durante decenas de millones de anos, los cocodrilos modernos no llegaron hasta hace aproximadamente 3,8 millones de anos, lo que evidencia una clara diferencia entre los habitantes antiguos y los depredadores actuales de los rios australianos, concluye Smithsonian Magazine.


