El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, insto a Camboya y Tailandia a respetar la tregua acordada en Kuala Lumpur a finales de octubre, despues de que se reanudaran los enfrentamientos fronterizos que dejaron un muerto y tres heridos por disparos del Ejercito tailandes.
El portavoz de Guterres, Stephane Dujarric, dijo que el secretario general esta preocupado por las informaciones sobre nuevos enfrentamientos armados en la frontera entre ambos paises.
La ONU pidio a los gobiernos de Phnom Penh y Bangkok que cumplan el alto el fuego firmado el 26 de octubre en Malasia y apliquen las medidas de distension y de confianza incluidas en ese pacto, con el objetivo de alcanzar una solucion duradera por medios pacificos.
La solicitud de la ONU se produjo despues de que el primer ministro camboyano, Hun Manet, denunciara los choques en la frontera, que ocurrieron un dia despues de que Tailandia anunciara la suspension del acuerdo, atribuyendo la causa a una explosion en Sisaket que hirio a dos militares tailandeses.
El gobierno tailandes informo la suspension del proceso de paz tras la detonacion de una mina terrestre en la frontera. El Ejercito Real de Tailandia indico que uno de los soldados sufrio una lesion grave en la pierna y otro recibio atencion medica por molestias en el pecho ocasionadas por la onda expansiva.
En los enfrentamientos recientes se registraron intercambios de disparos, bombardeos y lanzamiento de cohetes, lo que deterioro significativamente las relaciones diplomaticas entre Camboya y Tailandia. Ambos paises retiraron a sus embajadores y Tailandia cerro los pasos fronterizos, permitiendo unicamente el retorno de trabajadores migrantes.
El portavoz oficial de Tailandia, Siripong Angkasakulkiat, confirmo que Bangkok detendra la aplicacion de la declaracion conjunta firmada con Phnom Penh, que incluia medidas de confianza y la liberacion de 18 soldados camboyanos detenidos en Tailandia desde los combates mas recientes.
El primer ministro tailandes, Anutin Charnvirakul, afirmo que consideraban que la amenaza habia disminuido, pero que los hechos demostraban lo contrario. Por su parte, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Camboya expreso su profunda preocupacion y reitero su compromiso con la paz y con la implementacion del acuerdo bilateral.
El fin de un alto al fuego “imposible”
El acuerdo bilateral, mediado por el presidente de Estados Unidos, buscaba consolidar una tregua duradera tras los enfrentamientos de julio, que provocaron mas de 40 muertos y alrededor de 300.000 desplazados en ambos lados de la frontera.
Antes de la firma del tratado en Kuala Lumpur, el presidente estadounidense destaco que se habia logrado algo que muchos consideraban imposible, y elogio el proceso que condujo al acuerdo.
Trump tambien comento sobre su implicacion en la mediacion internacional, afirmando que le gustaba participar en estos asuntos y que se sentia competente en ese papel.
A pesar de sus elogios a los lideres de Tailandia y Camboya por el respeto mostrado durante las negociaciones, la diplomacia ha quedado afectada por la reanudacion de los enfrentamientos entre ambos paises.
(Con informacion de Europa Press)


