En 2003, durante la guerra de Irak, el despliegue de mamiferos marinos entrenados por la Armada de Estados Unidos permitio abrir pasos seguros para la llegada de ayuda humanitaria. Las operaciones contaron con la participacion destacada de Makai y Tacoma, dos delfines nariz de botella que facilitaron el transito de embarcaciones en aguas contaminadas con explosivos.
El Programa de Mamiferos Marinos de la Armada, administrado por la Division de Reconocimiento e Interdiccion del Centro Nacional de Guerra del Pacifico (NIWC Pacific), tiene su sede en Point Loma, San Diego, desde la decada de 1960. Su objetivo es entrenar delfines nariz de botella y leones marinos de California para detectar, localizar, marcar y recuperar objetos en puertos, zonas costeras y mar abierto, segun su pagina oficial.
El programa se origino tras los primeros experimentos con Notty, una hembra de delfin de flancos blancos del Pacifico, en 1960. En sus primeros anos evaluo las capacidades sensoriales y fisicas de mas de una docena de especies de mamiferos marinos, asi como de tiburones, rayas, tortugas y aves marinas.
Los heroes marinos en Irak
Segun el Proyecto Internacional de Mamiferos Marinos (IMMP), Makai y Tacoma despejaron rutas de acceso para embarcaciones en una tarea que los buzos compararon con “arrastrarse por el fango con los ojos cerrados”.
En las primeras semanas de la operacion, los equipos limpiaron alrededor de 1,690 millas nauticas de agua, inspeccionaron 237 objetos y participaron en la recuperacion o destruccion de mas de cien minas, segun un articulo de la Revista de Destruccion de Armas Convencionales de la Universidad James Madison. Fue la primera vez que los delfines del programa se emplearon en un entorno de combate.
La retirada de las fuerzas iraquies de Umm Qasr, el unico puerto de aguas profundas del pais, dejo un campo minado que impedia la entrada de naves. Para despejarlo se movilizaron fuerzas de Estados Unidos, Australia y Reino Unido, incluyendo unos cincuenta buzos con tecnologia avanzada, que trabajaron durante cuatro dias junto a los delfines.
Ademas de Makai y Tacoma, participaron otros ejemplares como Jefe y Khalili (machos) y Kona y Punani (hembras). En pocas horas el equipo abrio un paso para el buque de ayuda humanitaria Sir Galahad y, tras despejar un canal de navegacion de ochenta kilometros, amplio sus labores a areas con presencia de explosivos.
Ademas del puerto de Umm Qasr, la intervencion incluyo la limpieza del canal Khawr Abdullah, que conecta el puerto con el Golfo. Veterinarios y entrenadores supervisaron la salud de los animales durante el despliegue, observando que se adaptaron sin problemas a un entorno similar a su habitat natural.
Anos despues, en 2017, la salud de Makai empeoro por una enfermedad de la columna vertebral que le impedia nadar o mantenerse erguido para respirar. Tras cuatro meses de cuidados intensivos y ante el agravamiento de su condicion, la Armada decidio practicarle la eutanasia. No se dispone de informacion publica sobre el destino de Tacoma.
Entrenamiento de los mamiferos marinos
Los delfines cuentan con un sistema natural de localizacion acustica altamente desarrollado, que les permite detectar minas y otros objetos en el fondo marino, incluso en condiciones donde el sonar electronico es menos efectivo, como aguas poco profundas o puertos congestionados.
Segun la pagina oficial del Programa, tanto delfines como leones marinos tienen buena vision en condiciones de baja luminosidad y un oido direccional subacuatico que facilita el rastreo de objetivos en aguas oscuras o turbias.
Ademas, estos animales pueden sumergirse a grandes profundidades sin riesgo de enfermedad por descompresion, una limitacion habitual en los buceadores humanos. Aunque en el futuro se espera que los drones submarinos asuman algunas tareas, la tecnologia actual todavia no iguala la eficacia de estos mamiferos.
En operaciones de recuperacion, los leones marinos localizan y enganchan cabos al equipo de la Armada en el fondo marino, mientras que los delfines estan entrenados para buscar y marcar la ubicacion de minas que amenazan la seguridad de embarcaciones militares y civiles. Ambos tambien colaboran en la deteccion y detencion de nadadores o buceadores no autorizados que puedan suponer un riesgo para personas, buques o instalaciones portuarias.
Para desplazamientos cortos, los animales pueden nadar junto a pequenas embarcaciones o viajar en ellas. En traslados mas largos, la Armada los transporta por mar en buques o por aire en aviones y helicopteros, garantizando su bienestar durante el traslado.


