El Concejo Deliberante de Tigre dio luz verde este miércoles a la viabilidad urbanística del emprendimiento Remeros Brickell, un complejo residencial de planta baja y ocho pisos que se construirá en la esquina de Esquiú y Williams, a pocos metros del Camino de los Remeros, en Rincón de Milberg. La medida desató un fuerte enfrentamiento entre el oficialismo local y el bloque del Frente Renovador (FR), que votó en contra del proyecto.
La iniciativa, presentada por la empresa Desarrollos Inmobiliarios TS2 S.A., prevé levantar 321 departamentos y cuatro locales comerciales, con una superficie total de 23.744 metros cuadrados.
La propuesta fue aprobada con 20 votos positivos, dos negativos y dos ausencias. Respaldaron el proyecto los bloques alineados con el intendente Julio Zamora, junto a La Libertad Avanza y Juntos por Tigre. El FR —a través de Pablo Acevedo y Adriana La Magna (Unión Renovación y Fé)— fue el único espacio que se opuso.
La decisión se enmarca en un debate cada vez más intenso en Tigre sobre el rumbo del desarrollo urbano y las consecuencias de los emprendimientos de alta densidad. Este eje fue central en la campaña de Sebastián Rovira, dirigente del massismo y candidato de Fuerza Patria, que resultó ganador en las elecciones del 7 de septiembre.
La postura del Frente Renovador
El concejal Pablo Acevedo, del Frente Renovador Fuerza Patria, expresó su rechazo a la iniciativa argumentando un mensaje electoral contundente en las urnas contra este tipo de construcciones. «No podemos permitir que el negocio de unos pocos nos quite la tranquilidad y convierta cada salida del barrio en un dolor de cabeza», sostuvo Acevedo.
El edil también elevó una pregunta sobre la transparencia de la inversión: «Desde nuestro espacio Frente Renovador Fuerza Patria que nos den una lista de funcionarios y sus familiares directos que tienen departamentos o un interés. ¿Cuál es el verdadero origen de esta inversión? ¿Es plata limpia que viene a construir un Tigre mejor o es un dinero sucio que busca lugar en el cemento?».
La respuesta del oficialismo
En respuesta, Lucas Gianella, del oficialismo de Tigre, desestimó la lectura electoral de Acevedo. Negó que hubiera habido un «semejante apoyo en las urnas», mencionando que en la última elección el desempeño de Fuerza Patria en Tigre fue «uno de los peores de la primera sección electoral con una diferencia de dos puntos».
Gianella defendió la legalidad del proyecto, señalando que existe una ordenanza de zonificación aprobada durante la gestión de Ubieto, la cual no fue modificada ni en la intendencia de Sergio Massa ni en la de Ubieto, y que «con respecto a la zona de Milberg no especifica límites». En este sentido, aclaró que la aprobación para Remeros Brickell es por un límite de ocho pisos, y que las «torres» son consideradas de 20 pisos para arriba, como las que «se hicieron durante la gestión del Frente Renovador como también Countries y barrios privados».
Finalmente, el concejal oficialista atribuyó el crecimiento a la «gestión local efectiva que hace que mucha gente quiera vivir acá», y dio la «bienvenida al debate para un nuevo código de zonificación para los nuevos vecinos».


