Ucrania afronto la ultima semana una de las ofensivas aereas mas intensas desde el inicio de la invasion rusa. Segun denuncio el presidente Volodimir Zelensky, Moscu lanzo alrededor de mil drones de combate contra territorio ucraniano, ademas de cerca de un millar de bombas aereas guiadas y varias decenas de misiles.
El volumen y la cadencia de los ataques muestran un patron: Rusia eleva la presion sobre las defensas ucranianas en un momento de desgaste material y politico de Kiev, que espera nueva ayuda occidental.
En un mensaje difundido por Telegram, Zelensky explico que solo en la noche del sabado las fuerzas rusas desplegaron mas de 170 drones, al menos la mitad del tipo Shahed, un modelo de fabricacion irani que Rusia ha adaptado y producido localmente.
“A lo largo de toda esta semana, los rusos lanzaron contra nuestro pueblo alrededor de mil drones de combate, casi 980 bombas aereas guiadas y 36 misiles de diferentes tipos”, senalo el mandatario, destacando la amplitud y diversidad del armamento utilizado.
La magnitud del ataque obligo a activar de nuevo el sistema de defensa aerea que Ucrania ha ido ensamblando con apoyo occidental. Zelensky ha insistido en que la proteccion del pais requiere un enfoque multicomponente: baterias antiaereas, aviacion de combate, equipos moviles de interceptacion y drones defensivos.
Kiev lleva meses solicitando mas sistemas Patriot, NASAMS e IRIS-T, asi como municion y repuestos, ante el deterioro de sus existencias.
Los ataques provocaron danos en varias regiones. En Kharkiv, Odesa y Dnipropetrovsk se continuan las tareas de reconstruccion, segun el presidente. Equipos de emergencia tambien intervinieron en Sumy y Cherniguiv.
La presion sobre ciudades e infraestructuras ha sido constante desde principios de otono, cuando Rusia intensifico su estrategia de desgaste energetico y militar de cara al invierno.
La Fuerza Aerea ucraniana informo que Rusia lanzo un misil balistico Iskander-M desde Rostov y 176 drones de distintos modelos, incluidos Shahed y Gerbera, desde varias zonas del territorio ruso y desde Crimea ocupada. Cerca de cien de ellos eran drones kamikaze Shahed, disenados para saturar las defensas y detectar puntos vulnerables.
Hasta las nueve de la manana del sabado, las fuerzas ucranianas habian derribado o neutralizado 139 aparatos en el norte, sur y este del pais, aunque se registraron impactos en 14 localidades.
En la region de Odesa, las fuerzas rusas volvieron a apuntar a la infraestructura energetica. Oleg Kiper, jefe de la administracion militar local, indico que una planta de energia solar sufrio danos tras el ataque nocturno; las autoridades afirmaron que no hubo victimas y que los incendios fueron controlados con rapidez.
El acoso sistematico a la infraestructura energetica ucraniana no es nuevo. El invierno pasado Moscu lanzo una campana masiva que dejo sin suministro electrico a millones de personas, una estrategia condenada por Naciones Unidas y que Kiev considero un intento de minar la moral de la poblacion.
Este ano, analistas del Instituto para el Estudio de la Guerra (ISW) y del Centro de Estudios Estrategicos Internacionales (CSIS) advirtieron que Rusia podria intentar repetir la tactica, aplicando las lecciones acumuladas en mas de dos anos de conflicto.
Zelensky subrayo que el Gobierno trabaja en “nuevos acuerdos solidos con Europa” para reforzar la defensa aerea. El presidente inicio una gira por Grecia, Paris y Madrid para acelerar compromisos militares y politicos que permitan sostener la resistencia ucraniana ante el aumento de los ataques.
La diplomacia ucraniana actua con urgencia: el bloqueo parcial del Congreso estadounidense mantiene estancado un paquete clave de ayuda militar, mientras varios paises europeos advierten que sus arsenales estan sometidos a presion.
En este contexto, la ofensiva rusa parece disenada para explotar un vacio temporal en los suministros occidentales, poniendo a prueba la capacidad ucraniana de resistir una campana prolongada de drones y municion guiada.
Kiev sostiene que, pese a la intensidad de los ataques, su defensa logro interceptar la mayor parte de los aparatos. No obstante, los danos acumulados, la erosion de la red energetica y el desgaste humano y material plantean un reto central de cara al invierno.
Con la guerra entrando en su tercer ano, cada oleada de drones y misiles refuerza la impresion de que Moscu busca una victoria por agotamiento. Ucrania intenta mantener su defensa en un escenario internacional cada vez mas incierto. Cada noche, mientras los equipos de rescate trabajan entre escombros y cortes electricos, la batalla aerea evidencia que el conflicto esta lejos de resolverse a corto plazo.


