Diez anos despues de sobrevivir al mayor atentado yihadista en Paris, Eva dice que esa tragedia forma parte de su vida. Por primera vez rompe su silencio para contar como intenta sobreponerse a un ataque que conmociono profundamente a la sociedad francesa.
Era la noche del viernes 13 de noviembre de 2015 y celebraba el cumpleanos de su mejor amiga. Estaba en la acera fumando con tres amigos cuando los yihadistas abrieron fuego contra el restaurante, episodio en el que murieron 21 personas en ese lugar.
Evoca el “silencio aterrador” entre las rafagas de disparos. Recibio varios impactos en el lado izquierdo del cuerpo, incluido el pie; le amputaron la pierna por debajo de la rodilla y conserva una gran cicatriz en el brazo.
“Han pasado diez anos, es parte de mi”, afirma la mujer de 35 anos, que prefiere no revelar su apellido.
Aquella noche, comandos del grupo Estado Islamico mataron a 130 personas en una sala de conciertos, en restaurantes y bares de la capital francesa y cerca de un estadio en Saint-Denis.
Los atentados sacudieron a Francia y este jueves se celebran diversas ceremonias de homenaje a las victimas.
Con una protesis en la pierna, Eva asegura que esta “bastante bien”, aunque admite que “la vida no es facil todos los dias”.
En verano sigue percibiendo las miradas de extranos hacia la cicatriz de su brazo. Penso en una cirugia reconstructiva, pero considera que en pieles oscuras es mas complicado, explica.
Aunque vuelve a salir a bares, asegura que “nunca mas” dara la espalda a la calle.
“Nos persigue”
Para algunos supervivientes y familiares, el aniversario revive el miedo y el dolor.
“Nos persigue”, afirma Bilal Mokono, de unos 50 anos y en silla de ruedas tras resultar herido en un ataque suicida cerca del Estadio de Francia.
Desde su casa en las afueras de Paris cuenta que desde entonces duerme mal. Perdio el uso de las piernas y el oido izquierdo; su brazo derecho sigue siendo “muy fragil”.
En ese mismo ataque murio Manuel Dias, de 63 anos. Su hija, Sophie Dias, teme que se olvide la memoria de “un padre unico”.
“Sentimos su ausencia todos los dias (…) Es importante conmemorar el decimo aniversario”, explica.
No todos comparten esa postura. Fabien Petit opina que la sociedad debe seguir adelante. Su cunado, Nicolas Degenhardt, de 37 anos, murio en el cafe Bonne Biere junto con otras cuatro personas.
“No podemos seguir reviviendo el 13 de noviembre una y otra vez”, dice Petit, que asegura sentirse “mejor” tras haber atravesado un periodo de pensamientos oscuros.
Reconoce emocionarse al recordar la tragedia, pero apunta que el juicio le ayudo. El proceso, celebrado entre 2021 y 2022 y con una duracion de diez meses, termino con la cadena perpetua para el unico miembro superviviente del grupo atacante, Salah Abdeslam.
“El sonido de esas ametralladoras”
Aurelie Silvestre, cuya pareja Matthieu Giroud murio en la sala de conciertos Bataclan junto a otras 89 personas, recogio su experiencia en un libro.
“Escribir me permitio recoger algunos restos y volver a unirlos”, dice. Estaba embarazada cuando perdio a su pareja.
“En las circunstancias, estoy bien, muy bien, pero no es facil. Crio sola a dos hijos cuyo padre fue asesinado”, anade.
Algunos sobrevivientes no lograron sobreponerse a las secuelas.
El quimico Guillaume Valette y el autor de novelas graficas Fred Dewilde lucharon durante anos contra heridas psicologicas antes de quitarse la vida.
“Nunca olvidare el sonido de esas ametralladoras”, habia dicho Valette a sus padres, Arlette y Alain Valette. Ocho anos despues de su muerte, ellos aun recuerdan esas palabras y el cambio que notaron en su hijo, que habia “perdido la sonrisa”, relato su padre a la AFP.
Tras su fallecimiento, sus padres trabajaron para que su hijo fuera reconocido como la victima numero 131; su nombre figura ahora en las placas conmemorativas del 13 de noviembre, junto al de Dewilde, fallecido en 2024.
Segun el psiquiatra Thierry Baubet, los recursos para tratar el trauma psicologico en Francia han mejorado desde 2015, aunque aun son insuficientes en algunas regiones.
“Hay victimas de los atentados del 13 de noviembre que siguen sufriendo y no han buscado ayuda”, senala, anadiendo que uno de los obstaculos es el “miedo a no ser comprendido”.
Pero subraya que “nunca es demasiado tarde” para acudir por apoyo.
“Siempre te sentiras solo”
Cuando Lola, la hija de 17 anos de Eric Ouzounian, murio en el Bataclan, un terapeuta le advirtio: “Nunca lo superaras y siempre te sentiras solo”.
“Diez anos despues, sigue siendo cierto. No te recuperas de la perdida de un hijo”, cuenta Ouzounian, periodista de 60 anos, mientras toma un cafe y fuma un cigarro.
En 2015 se nego a asistir al homenaje en Paris y publico una tribuna en la que criticaba al Estado por politicas internas que, a su juicio, habian generado “zonas de desesperacion”.
Denuncia que las condiciones de vida en esos barrios, de donde procedian algunos de los yihadistas, no han mejorado y que las autoridades continuan “despreciando” a los residentes.
El historiador Denis Peschanski observa que, con el tiempo, los franceses recuerdan con menos detalle los lugares concretos de los atentados. El Bataclan sigue siendo el mas conocido, pero hubo otros muchos puntos afectados.
Roman, superviviente del ataque al restaurante La Belle Equipe, decidio hablar para que la memoria no se limite solo a la masacre del Bataclan.
“A veces nos sentimos olvidados”, relata este hombre de 34 anos, que prefiere no dar su apellido.
Anos despues del ataque opto por dedicarse a la ensenanza: “Ensenar historia y geografia era importante, no solo para intentar que esto no vuelva a pasar, sino tambien para transmitir a los jovenes lo que vivimos”.
(Con informacion de AFP)
