La carencia de condiciones adecuadas para el transito peatonal en Cordoba es un problema cronico que pone en riesgo a miles de personas cada dia, especialmente a quienes tienen movilidad reducida, personas mayores y usuarias de sillas de ruedas.
Un sondeo de la Fundacion Relevando Peligros, aunque data de mas de una decada, mantiene su diagnostico: el 69% de las manzanas de la ciudad no cuenta con las rampas necesarias. De las rampas existentes, solo el 13% esta en condiciones optimas y alrededor del 50% presenta superficies resbaladizas.
Estas deficiencias en la infraestructura se combinan con otros obstaculos recurrentes: baldosas rotas, desniveles pronunciados, pozos profundos alrededor de arboles, carteles que invaden la vereda y accesos a cocheras que no respetan la normativa. En conjunto, generan un recorrido peligroso para quienes transitan a pie o en silla de ruedas.
En primera persona: la lucha de las personas en silla de ruedas
Ante la falta de respuestas oficiales, un grupo de jovenes en silla de ruedas decidio intervenir por sus propios medios. Frente al Colegio Carbo, en la interseccion de 9 de Julio y Rodriguez Pena, integrantes de la organizacion Derechos sobre Ruedas repararon una seccion de vereda que consideraban intransitable. La organizacion, sin fines de lucro, trabaja por los derechos de personas con movilidad reducida.
Los miembros relataron que a menudo tuvieron que circular por la calzada en sentido contrario al transito, exponiendose a choques, y que sus reclamos formales no obtuvieron respuesta. Vecinos senalaron que el deterioro de esa acera persistia desde hace 15 o 20 anos.
Para mitigar el riesgo, compraron cemento y arena y taparon al menos ocho baches profundos en la zona de Plaza Colon. Llevaron los materiales en sus regazos y apoyos de las sillas hasta el lugar. Segun sus testimonios, sin esa intervencion corrieron el riesgo real de volcar o sufrir caidas; uno de los companeros ya habia sufrido lesiones y danos en su equipo en esa misma acera.
Mas alla de reparar hoyos, la accion busco visibilizar la capacidad laboral y la dignidad de estas personas. Los jovenes explicaron que no tienen empleo formal y subsisten con changas -como carpinteria o mecanica- y que su trabajo en la reparacion demostro eficacia equivalente a la de cualquier otra persona. Recalcaron que, con voluntad, no existen barreras insalvables.
“No es que queramos reemplazar al municipio, pero si no lo hacemos nosotros, nadie lo hace y seguimos arriesgando la vida todos los dias”, senalo uno de los integrantes. Ademas, varios viven en barrios sin veredas ni asfalto, lo que complica su vida cotidiana: cuando llueve deben pedir ayuda y despues limpiar las ruedas para no ensuciar en sus casas.
Tambien advirtieron que las ruedas de las sillas son caras y dificiles de conseguir en el pais, de modo que cualquier dano implica una carga economica y limita la autonomia. Sin sillas en condiciones, dijo uno de ellos, es imposible salir a trabajar o a realizar tramites medicos.
Desde la Universidad Nacional de Cordoba, el Observatorio Urbano Cordoba (OUC) elaboro un indice de “caminabilidad” que evalua la calidad del transito peatonal. El analisis confirma que en el centro de la ciudad las veredas no estan en condiciones adecuadas para la circulacion segura.
El indice de caminabilidad integra cuatro dimensiones: calidad ambiental, seguridad vial y peatonal, conectividad y actividad comercial, e infraestructura urbana. Mide la capacidad de las vias para garantizar un transito seguro y comodo, independientemente de la edad o condicion fisica. Segun especialistas consultados, un corredor seguro deberia ofrecer un paso libre de obstaculos de al menos 1,20 metros de ancho y 2,10 metros de alto, parametros que a menudo no se cumplen.
Veredas sin inclusion: De quien es la responsabilidad?
La Ordenanza N 8116, sobre higiene y mantenimiento de inmuebles, asigna en primera instancia al frentista o propietario la obligacion de mantener la vereda en condiciones transitables y de reparar de manera inmediata los deterioros.
No obstante, la Municipalidad conserva funciones de control y supervision. La jurisprudencia -por ejemplo, la Sentencia 223 de la Camara Quinta de Apelaciones en lo Civil y Comercial- reconoce que, aun delegando la responsabilidad al frentista, el municipio mantiene una “guarda juridica” sobre las veredas, que forman parte del dominio publico municipal segun el Codigo Civil.
Por ello, si el mal estado de la via publica constituye un riesgo y provoca un accidente, el municipio puede ser civilmente responsable si omite su deber de inspeccion e intervencion. La obligacion estatal exige un sistema activo de control, no una actitud meramente pasiva.
En lo que respecta a rampas, el Codigo de Edificacion local fija pautas tecnicas: deben situarse en las esquinas, tener un ancho minimo de 0,90 metros, una pendiente maxima del 12% y un solado antideslizante.
Aunque la Municipalidad anuncio la construccion de mas de 800 rampas desde 2022 y licito obras por casi 150 millones de pesos, organizaciones como Derechos sobre Ruedas senalan que muchas de esas rampas presentan deficiencias de diseno, inclinacion y materiales, lo que incumple normas como el Decreto 463/96, Art. 2.2.3.1.10.
La accesibilidad plena es un derecho que requiere soluciones estructurales sostenidas, no medidas simbolicas o temporales. El ejemplo de las personas que repararon sus propias veredas evidencia la urgencia de acciones concretas para garantizar el transito seguro y la inclusion. Mientras no se adopten medidas efectivas, la infraestructura urbana obliga a una parte de la poblacion a afrontar diariamente riesgos y limitaciones que afectan su dignidad y autonomia.
