Unos 92.000 habitantes del norte de Mozambique fueron desplazados desde finales de septiembre debido a ataques violentos atribuidos a grupos yihadistas.
Medicos Sin Fronteras (MSF) informo que las provincias mas afectadas son Cabo Delgado y Nampula. Las incursiones armadas, que se intensificaron en los ultimos meses, obligaron a miles de familias a abandonar sus comunidades y buscar refugio en otras localidades de la region.
En Mueda se registro la llegada de aproximadamente 23.000 personas, muchas procedentes de Mocimboa da Praia y de areas rurales cercanas. Los ataques recurrentes generaron temor generalizado y provocaron un exodo que saturo la capacidad de acogida en centros y campamentos improvisados.
Las personas desplazadas relatan que su huida fue forzada por la falta de proteccion e incertidumbre, y describen experiencias de violencia y perdidas.
Tras asentarse en nuevos campamentos, los desplazados enfrentan serias dificultades para acceder a servicios basicos.
La demanda de agua potable y saneamiento, junto con la presion sobre los servicios de salud, aumento el riesgo de enfermedades transmisibles, especialmente ante la proxima temporada de lluvias.
MSF advierte que el sistema sanitario local no puede cubrir la totalidad de las necesidades medicas; ademas se observa un incremento de casos de estres y otras afecciones asociadas al trauma.
La respuesta asistencial incluye campanas de vacunacion y actividades de promocion de la salud, coordinadas con las autoridades y con el apoyo de la Asociacion Italiana Amigos de Raoul Follereau (Aifo).
El programa “Salud sin barreras”, financiado por la cooperacion internacional italiana, se enfoca en llevar atencion medica y prevencion de enfermedades cronicas a zonas rurales remotas.
Simona Venturoli, directora de programas de Aifo, dijo a Vatican News que la atencion se ve obstaculizada por la falta de personal calificado, recursos tecnicos limitados y las grandes distancias hasta los centros comunitarios.
La llegada masiva de personas aumento la vulnerabilidad de mujeres y ninos. EFE documento casos de menores separados de sus familias, afectados por desnutricion o traumas derivados de la violencia, lo que dificulta su integracion y el acceso a educacion y apoyo psicosocial.
Las organizaciones que trabajan en el terreno han reiterado el llamado a garantizar la proteccion de civiles y la seguridad del personal humanitario. En ese contexto, MSF solicita salvaguardias para su personal e instalaciones medicas.
La Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) califico la crisis en el norte de Mozambique como una de las mas complejas del sur de Africa, agravada ademas por ciclones, inundaciones y sequias. ACNUR informo haber recibido solo 66 millones de los 352 millones de dolares solicitados para 2023, lo que limita la respuesta humanitaria.
(Con informacion de EFE y Europa Press)


