Seis valiosas estatuas de marmol de epoca romana fueron sustraidas del Museo Nacional de Siria en Damasco, segun informaron autoridades y medios, lo que ha generado preocupacion entre expertos y responsables culturales. El robo, detallado por Associated Press, fue detectado el lunes 19 de mayo y se considera una de las perdidas patrimoniales mas importantes desde el inicio de la guerra civil hace 14 anos.
A pocos dias de un asalto similar en el Museo del Louvre en Paris, este nuevo incidente subraya la vulnerabilidad del patrimonio cultural a escala internacional. Funcionarios de la Direccion General de Antiguedades y Museos de Siria indicaron que la sustraccion ocurrio durante la noche del domingo y fue advertida a la manana siguiente, cuando el personal encontro una puerta forzada en el departamento clasico del museo.
El museo fue cerrado temporalmente mientras se desarrolla la investigacion, lo que aumenta la inquietud en una ciudad que todavia arrastra las consecuencias del conflicto reciente y de la caida del gobierno de la familia Assad el ano pasado.
El Museo Nacional de Damasco alberga una de las colecciones mas importantes del Medio Oriente, con piezas de las epocas helenistica, romana y bizantina.
Desde el inicio de la guerra civil en marzo de 2011 se reforzaron las medidas de seguridad -con portones metalicos, camaras y el traslado de cientos de objetos a Damasco desde distintas regiones-, pero esas precauciones no impidieron el audaz robo del pasado fin de semana.
Los detalles del robo
Funcionarios sirios, que hablaron bajo condicion de anonimato por regulaciones internas, senalaron que entre lo sustraido figuran seis estatuas de marmol de la era romana; se investiga ademas si otras piezas valiosas resultaron afectadas.
El brigadier general Osama Atkeh, jefe de la policia de Damasco, explico a la agencia estatal SANA que, ademas de las estatuas, se llevaron varios objetos raros de la coleccion. Indico que los guardias y otras personas vinculadas al museo estan siendo interrogadas para determinar posibles responsabilidades.
Maamoun Abdulkarim, exjefe de Antiguedades y Museos, describio la seccion afectada como “un departamento hermoso y de enorme riqueza historica”, y destaco que sus colecciones conservan testimonios de mas de dos mil anos de cultura e historia siria.
Una periodista de Associated Press intento ingresar al museo el martes, pero los guardias informaron que permanecia cerrado. El recinto habia reabierto al publico en enero, tras el fin de los combates y la huida del expresidente Bashar Assad, como parte de los esfuerzos por reactivar la vida cultural de la capital.
Patrimonio amenazado en un pais en crisis
El robo pone de manifiesto la situacion precaria del patrimonio arqueologico en Siria y la fragilidad institucional en medio de los recientes cambios politicos. Durante mas de una decada de guerra, sitios historicos de gran valor, como la antigua ciudad de Palmira, sufrieron danos severos por saqueos y ataques de grupos extremistas.
En 2015, militantes del Estado Islamico destruyeron mausoleos y monumentos en Palmira, un sitio reconocido como patrimonio de la humanidad por la UNESCO. En la actualidad, museos y yacimientos sirios intentan recuperarse de anos de abandono, saqueos y destruccion.
La reapertura del Museo Nacional de Damasco en enero fue vista como un simbolo de resiliencia y esperanza, pero el reciente robo vuelve a poner en evidencia la amenaza que representan las redes delictivas que trafican con antiguedades en el mercado negro internacional.
Preocupacion debido a los antecedentes recientes
La noticia del asalto alarmo a la comunidad internacional especializada en arte y arqueologia. La falta de informacion oficial detallada ha aumentado la incertidumbre sobre el destino de las piezas, que podrian ser introducidas en circuitos clandestinos y vendidas a coleccionistas privados fuera del pais.
El caso recuerda robos recientes de alto perfil en museos europeos, incluido el asalto ocurrido hace semanas en el Museo del Louvre en Paris, donde una banda sustrajo parte de las joyas de la corona francesa, valoradas en aproximadamente 88 millones.
Aun con controles de seguridad avanzados, ese episodio evidencio vulnerabilidades significativas y alimento el debate sobre la necesidad de reforzar los sistemas de vigilancia en los principales centros artisticos del mundo.
Mientras tanto, las autoridades sirias trabajan contrarreloj para identificar a los responsables y recuperar las estatuas sustraidas.
