El 4 de noviembre, victorias democratas en elecciones extraordinarias de Virginia, Nueva Jersey y Nueva York dieron al partido un impulso hacia las elecciones de mitad de mandato. Ese optimismo se desvanecio pocos dias despues cuando siete senadores democratas y un independiente del grupo caucus apoyaron a los republicanos para aprobar un proyecto de ley de financiacion temporal que puso fin al cierre gubernamental mas prolongado en la historia reciente.
El acuerdo aprobado por el Senado mantiene el gobierno en funcionamiento hasta el 30 de enero y obliga a las agencias federales a readmitir a los empleados suspendidos durante el cierre, con pago retroactivo. No obstante, no incluye la extension de los creditos fiscales para la atencion medica que expiran a fin de ano, una demanda repetida de los democratas. John Thune, lider de la mayoria republicana en el Senado, prometio una votacion sobre esa prorroga el mes siguiente, aunque la oposicion en la Camara de Representantes hace improbable su aprobacion.
El proyecto procedera ahora a la Camara de Representantes, donde la votacion podria ser ajustada dada la estrecha mayoria republicana y la oposicion democrata. Hakeem Jeffries, jefe de la bancada democrata en la Camara, anuncio que no apoyara el acuerdo, pero el respaldo de Donald Trump podria inclinar a suficientes republicanos. El presidente califico el acuerdo como positivo y Mike Johnson, presidente republicano de la Camara, dijo esperar su aprobacion.
La estrategia de los ocho senadores disidentes cambio a medida que el cierre causo interrupciones economicas y logisticas: reducciones de vuelos por motivos de seguridad que generaron retrasos previos al Dia de Accion de Gracias; intentos de la administracion de recortar el Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP), que beneficia a mas de 40 millones de personas; y maniobras presupuestarias que mantuvieron el pago de las fuerzas armadas mientras se recortaban fondos para localidades gobernadas por democratas.
El senador independiente Angus King, que encabezo las negociaciones para terminar el cierre, afirmo que oponerse a Trump no funciono y que la confrontacion reforzo al presidente. Aunque las encuestas senalaban en su mayoria a los republicanos como responsables del estancamiento, los republicanos buscaron convencer a senadores democratas moderados durante la crisis. Varios de los senadores disidentes no enfrentan reeleccion el proximo ano y algunos anunciaron su retiro, lo que reducia el riesgo politico para ellos.
La decision provoco criticas internas en el partido: activistas progresistas y algunos representantes pidieron la dimision de Chuck Schumer como lider democrata en el Senado, a pesar de que Schumer voto en contra del fin del cierre. Moderados y dirigentes estatales tambien expresaron su descontento. Por ahora, Schumer conserva el apoyo de la mayor parte de su bancada, pero la situacion refleja tensiones y divisiones internas que podrian complicar la estrategia democrata frente al presidente.
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