La apertura del Gran Museo Egipcio, junto a las piramides de Guiza, ha reavivado el debate internacional sobre la restitucion de objetos arqueologicos que se conservan en museos occidentales. Este nuevo complejo, concebido como un gran espacio para la civilizacion faraonica, ha impulsado a Egipto a renovar sus demandas de repatriacion de piezas emblematicas como el busto de Nefertiti, la piedra de Rosetta y el zodiaco de Dendera.
La inauguracion, que exhibe mas de cien mil piezas y cuyo coste supero los mil millones de dolares, fue presentada por las autoridades egipcias como una reafirmacion cultural y un mensaje a la comunidad internacional. El entonces ministro de Antiguedades, Zahi Hawass, senalo: “La inauguracion del Gran Museo Egipcio es una invitacion a que los grandes museos del mundo devuelvan los objetos que salieron de Egipto de manera ilegal”. Para el gobierno, el museo demuestra la capacidad del pais para conservar y mostrar su patrimonio.
Las reclamaciones egipcias se dirigen a instituciones como el British Museum de Londres, el Louvre de Paris y el Neues Museum de Berlin. Entre los casos mas destacados esta el busto de Nefertiti, hallado en 1912 y trasladado a Alemania poco despues; Egipto considera que salio del pais de forma irregular, mientras que el Neues Museum defiende la legalidad de su adquisicion.
La piedra de Rosetta, clave para descifrar los jeroglificos, se exhibe en el British Museum desde 1802. Las autoridades egipcias sostienen que fue tomada durante la campana de Napoleon y luego paso a manos britanicas tras la derrota francesa. El museo britanico insiste en la legalidad del ingreso de la pieza y subraya su valor como patrimonio de interes universal, aunque admite que el asunto es sensible.
El zodiaco de Dendera, un bajorrelieve astronomico en el Louvre, es otro objeto reclamado por Egipto. Francia afirma que la pieza fue retirada en el siglo XIX con el consentimiento de las autoridades otomanas que entonces administraban Egipto; el gobierno egipcio cuestiona la legitimidad de esa autorizacion y pide su devolucion.
La apertura del Gran Museo ha reavivado el interes publico y de la comunidad internacional sobre el destino de estas piezas. Colectivos y especialistas en patrimonio han mostrado respaldo a las demandas egipcias, argumentando que la restitucion puede reparar injusticias historicas y reforzar la identidad cultural de los paises de origen. Tarek Tawfik, director del museo, expreso que el objetivo es que el mundo reconozca la importancia de que estos tesoros regresen a Egipto para ser apreciados en su contexto original.
Los museos occidentales mantienen posturas diversas: algunos han iniciado procesos de devolucion a paises africanos y asiaticos, mientras que otros defienden la legalidad de sus colecciones y su funcion como custodios y difusores del patrimonio universal. En anos recientes el debate ha cobrado intensidad, impulsado por movimientos sociales y por la presion de gobiernos reclamantes.
Construido durante mas de dos decadas a pocos metros de la Gran Piramide, el Gran Museo Egipcio ofrece instalaciones modernas y espacios expositivos amplios; entre sus piezas alberga la coleccion completa de Tutankamon, muchas mostradas al publico por primera vez. La inauguracion se celebro como un hito nacional y como un argumento mas en la campana egipcia por recuperar su patrimonio disperso.
Aunque la discusion sobre la repatriacion de bienes culturales trasciende a Egipto, la dimension del reclamo y la visibilidad internacional del museo han situado al pais en el centro de un debate global sobre la propiedad y la gestion del legado cultural. Las autoridades egipcias, con el respaldo de la comunidad academica local y sectores de la sociedad civil, defienden la restitucion como una cuestion de justicia historica y de soberania nacional.


