El Museo Romano de Lausana, en Suiza, sufrio un robo audaz en las ultimas horas: dos delincuentes se llevaron decenas de monedas de oro romanas, una coleccion de valor arqueologico incalculable. El asalto, informado por The Associated Press, puso de relieve la creciente vulnerabilidad de los museos europeos ante delitos patrimoniales cada vez mas sofisticados.
El incidente ocurrio poco antes del cierre del museo. Segun fuentes policiales citadas por AP y Excelsior, los sospechosos ingresaron como visitantes tras comprar sus entradas, aprovecharon los ultimos minutos para atacar al unico guardia presente y forzaron la vitrina donde se exhibian las monedas, logrando huir con el botin.
Una operacion meticulosa y un testimonio clave
La policia de Lausana y los reportes de AP indican que los ladrones planificaron la operacion: entraron de forma discreta, esperaron a que las salas quedaran vacias y atacaron al guardia, un hombre suizo de 64 anos. Fue inmovilizado pero no resulto herido y, tras el episodio, pudo aportar datos utiles a la investigacion.
La vitrina violentada contenia una coleccion permanente de monedas de oro romanas, consideradas un testimonio directo de la antiguedad. La perdida no solo representa un dano patrimonial irreversible, sino que tambien socava la capacidad de la comunidad cientifica para estudiar y comprender ese periodo historico.
Tras el robo, el museo realizo un inventario para precisar cuantas monedas faltaban y evaluar su valor cultural. Fuentes policiales consultadas por AP subrayaron que, mas alla de su valor economico, estas piezas tienen un valor arqueologico insustituible para la investigacion sobre la antigua Roma.
El guardia consiguio activar la alarma de panico despues de la agresion, lo que permitio una respuesta policial rapida; sin embargo, los autores ya habian abandonado el lugar cuando llegaron las patrullas. Las autoridades ofrecieron apoyo psicologico al personal del museo tras el suceso.
Una ola de robos patrimoniales golpea Europa
El robo en Lausana se inscribe en un contexto de creciente inquietud en el sector cultural, marcado por varios atracos de alto perfil en museos europeos en meses recientes. El 19 de octubre de 2025, por ejemplo, un grupo entro al Museo del Louvre de Paris usando una plataforma elevadora, rompiendo ventanas y vitrinas para llevarse joyas historicas francesas valoradas en mas de 102 millones de dolares, segun la fiscalia y reportes recopilados por Excelsior.
En septiembre, el Museo Nacional de Historia Natural de Paris tambien fue asaltado: delincuentes utilizaron amoladoras y antorchas para sustraer muestras de oro nativo estimadas en 600.000 euros. Un mes antes, en los Paises Bajos, una organizacion criminal hizo detonar la puerta del Museo Drents y se apodero de artefactos arqueologicos de oro, entre ellos un casco daciano de gran valor.
Estos hechos evidencian una tendencia preocupante: las piezas arqueologicas se han convertido en objetivos preferidos de redes criminales internacionales que operan con creciente audacia y sofisticacion. Las obras robadas suelen ser dificiles de rastrear y recuperar, ya que pueden introducirse en mercados ilicitos o ser fundidas, lo que agrava la perdida irreversible del patrimonio.
Patrimonio en riesgo
El gobierno regional de Vaud, propietario legal de las monedas sustraidas en Lausana, presento una denuncia penal, reafirmando el compromiso estatal con la proteccion del patrimonio. Voceros del museo y del Ejecutivo han senalado la intencion de reforzar las medidas de seguridad y de promover la cooperacion internacional para combatir el trafico ilicito de bienes culturales, segun The Associated Press.
Por ahora, la policia judicial de Lausana se encuentra a cargo de la investigacion, siguiendo varias lineas para identificar a los responsables y recuperar las piezas. A pesar de la respuesta rapida y coordinada, el episodio subraya que, sin estrategias solidas y tecnologia avanzada, los museos siguen expuestos a este tipo de delincuencia.
