1 de diciembre de 2025
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Teorias conspirativas que inspiraron Stranger Things

Stranger Things, la serie original de Netflix creada por Matt y Ross Duffer, se convirtio en un fenomeno de la cultura popular desde su estreno en 2016.

Ademas de su estetica de los anos 80, la ficcion toma inspiracion de una larga tradicion de teorias conspirativas estadounidenses.

La combinacion de ciencia ficcion con leyendas urbanas ayudo a diferenciar la narracion ambientada en el pueblo ficticio de Hawkins, Indiana, y a captar la atencion de una audiencia global.

En que historia “real” se basa “Stranger Things”?

En la fase inicial de desarrollo, los hermanos Duffer se interesaron por relatos sobre experimentos gubernamentales secretos que circularon en Estados Unidos durante la Guerra Fria.

El proyecto llego a llamarse provisionalmente Montauk, aludiendo a la teoria conspirativa conocida como “Proyecto Montauk”.

Ese mito surgio en los anos 80 cuando Preston Nichols y Al Bielek afirmaron recordar supuestos experimentos realizados en Camp Hero, tambien llamado Montauk Air Force Station, en Long Island, Nueva York.

Segun sus relatos, los ensayos -que habrian tenido lugar entre 1982 y 1987- buscaban desarrollar tecnicas de guerra psicologica y abarcaban temas como el control mental, los viajes en el tiempo y la potenciacion de habilidades psiquicas.

Los autores publicaron varios libros sobre el asunto y desde el principio presentaron la historia de forma ambigua: “Ya sea que leas esto como ciencia ficcion o no ficcion, estas ante una historia sorprendente”, escribieron en un prologo.

Esos relatos sirvieron de base para la idea original de la serie, que inicialmente pretendia mostrar los experimentos de Montauk desde la perspectiva de cientificos y supuestas victimas, con un tono casi documental.

Stewart Swerdlow, otro de los que ha dicho ser victima de esos experimentos, afirmo al diario The Sun haber sido abducido en 1970, cuando tenia 13 anos.

Swerdlow dijo que en los ensayos “utilizaban vagabundos, ninos en hogares de acogida y adictos” y que luego seleccionaban a personas con determinados antecedentes geneticos para fases mas avanzadas. Anadio que a muchos ninos les alteraban la memoria y la genetica, de modo que los recuerdos quedaban fragmentados en pesadillas o flashbacks, aunque en su caso, aseguro, no lograron borrar su memoria.

Tambien relato haber sido testigo de abusos fisicos contra otros menores durante el supuesto proyecto.

La leyenda del Proyecto Montauk se difundio con rapidez y la instalacion llego a ser apodada “el Area 51 de la costa Este”. Hoy parte de Camp Hero es un parque estatal, aunque persisten restricciones en algunas zonas.

El salto de la conspiracion real a la ficcion

Los creadores de Stranger Things han reconocido publicamente que esas teorias influyeron en la genesis de la serie, segun reporto The Guardian.

“Nos obsesionamos con la conspiracion despues de toparnos con ella siendo adolescentes”, dijeron los Duffer Brothers al presentar la idea.

Stranger Things toma elementos de esas narrativas y los traslada a una historia de ciencia ficcion centrada en el Laboratorio Nacional Hawkins y en el mundo alterno conocido como Upside Down.

El personaje de Eleven (Millie Bobby Brown), una nina sometida a experimentos de control mental, refleja directamente figuras descritas en los relatos de Montauk y remite ademas a investigaciones documentadas como el programa MKUltra.

La serie incorpora hechos reales documentados, como los experimentos de la CIA bajo MKUltra entre los anos 50 y 70: una comision del Senado en 1977 reconocio que ciudadanos fueron drogados sin su consentimiento en intentos de desarrollar un “suero de la verdad” y tecnicas de manipulacion del comportamiento.

“Stranger Things evoluciono a partir de una historia paranormal sobre un nino desaparecido cuando empezamos a hablar sobre los misteriosos experimentos gubernamentales que estaban ocurriendo al final de la Guerra Fria, justo cuando proyectos como MKUltra estaban finalizando”, explico Matt Duffer.

Conspiraciones dentro de la trama

La serie tambien explora como surgen los experimentos secretos y como se alimentan las teorias conspirativas dentro de la sociedad.

La paranoia se integra en la vida cotidiana de los personajes: figuras como Murray Bauman, periodista convertido en investigador, y Nancy Wheeler, periodista que investiga una posible conspiracion local, muestran la tendencia a buscar explicaciones alternativas ante lo inexplicable.

En la tercera temporada se introducen tramas directamente vinculadas con la paranoia propia de la Guerra Fria.

Desde la interceptacion de una transmision en ruso hasta la sospecha generalizada sobre los sucesos relacionados con el Upside Down, los habitantes de Hawkins interpretan lo desconocido a traves del prisma de las conspiraciones.

La serie tambien ejemplifica como hechos aislados pueden avivar la imaginacion conspirativa: aparatos que fallan, animales con conductas extranas o desapariciones que algunos vinculan de inmediato a fuerzas ocultas.

Segun The Conversation, la narrativa recrea como las teorias conspirativas tienden a intensificarse durante crisis sociales reales.

En la cuarta temporada, el personaje de Jason Carver, capitan del equipo de baloncesto, encarna la urgencia por hallar respuestas cuando ni la policia ni los medios las proporcionan.

Convencido de que el club Hellfire, que juega “Dungeons and Dragons”, esta ligado a practicas satanicas, moviliza a la comunidad en una especie de caza de brujas.

Ese arco muestra la propension a conectar elementos reales con creencias personales y a construir explicaciones alternativas que, aunque carentes de fundamento, pueden ganar traccion en comunidades dispuestas a actuar guiadas por la sospecha y el miedo.

Una matriz de referencias culturales

Ademas de las teorias conspirativas, Stranger Things recurre a una iconografia popular estadounidense que mezcla inocencia y desconfianza institucional.

La serie refuerza un clima de alerta mediante referencias estilisticas a peliculas como Amanecer rojo y Terminator, la recreacion de la vida suburbana y la presencia continua de productos comerciales emblematicos de los anos 80.

The Atlantic senala que la serie parte de la idea de que varias creencias delirantes podrian ser verdaderas: desde experimentos gubernamentales poco eticos hasta la existencia de criaturas monstruosas y la manipulacion de la realidad por poderes externos, lo que justificaria encubrimientos estatales.

La inclusion de alusiones a teorias sobre el asesinato de John F. Kennedy o la infiltracion de agentes sovieticos en el gobierno estadounidense contribuye a esa vision.

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