En medio de la crisis economica que atraviesa Bolivia y tras la toma de posesion del nuevo Gobierno, representantes del sector agroindustrial reclaman la aprobacion de normas que, segun ellos, mejorarian las condiciones del rubro y “fortalecerian el desarrollo productivo”.
Las iniciativas planteadas -tres proyectos de ley y cuatro decretos- abarcan temas como la transformacion de pequenas en medianas propiedades agricolas, la liberacion de exportaciones, la autorizacion de semillas transgenicas y mayores beneficios tributarios, entre otros.
Klaus Frerking, presidente de la Camara Agropecuaria del Oriente (CAO), urgio a que esas normas se aprueben “lo antes posible” y dijo tener prevista una reunion con el equipo del presidente Rodrigo Paz. En ese gabinete figuran dos antiguos representantes del lobby empresarial y agroindustrial de Santa Cruz, la principal region productiva del pais.
Esta manana, el ministro de Economia, Jose Gabriel Espinoza, adelanto la posible aprobacion proxima de algunas de las propuestas del sector agropecuario. En una conferencia de prensa en la que anuncio la eliminacion de cuatro impuestos y reformas al Presupuesto General del Estado, senalo que se eliminaran los cupos a las exportaciones. “Es una medida que tenemos descontada y que se va a tomar”, afirmo.
El ministro anadio que se trabaja en diez propuestas legislativas y que existen “una serie de procesos administrativos y tecnicos que seguir”, pero que en los proximos dias se haran anuncios al respecto.
En los ultimos anos, el sector agroindustrial intensifico sus gestiones para que el Ejecutivo y el Legislativo aprueben normas acordes con sus intereses y su vision de impulso a la produccion.
Durante la campana electoral organizaron un foro con candidatos presidenciales -al que no fue invitado Rodrigo Paz, que no figuraba como favorito en las encuestas- para presentar sus demandas. Mas adelante, sostuvieron un encuentro con legisladores electos de Santa Cruz y suscribieron un “pacto por la democracia y la gobernabilidad” orientado a respaldar su agenda sectorial.
Mientras la agenda agropecuaria avanza en el Ejecutivo, han surgido inquietudes sobre el contenido de los proyectos normativos.
La diputada Cecilia Requena considera que las propuestas pueden ser defendibles si responden al bien comun, pero advierte que hay aspectos relacionados con el aumento de la deforestacion y el uso de transgenicos que no estan claros y requieren discusion publica.
“Hay espacio para el debate en las demandas del sector, pero se presentan como demandas que deben ser practicamente obedecidas y rapidamente, sin debate publico”, declaro a Infobae.
Si bien Requena considera importante no obstaculizar el desarrollo de un sector relevante para la economia boliviana, pide “encontrar un equilibrio y plantear soluciones realistas” que protejan derechos y atiendan consideraciones ambientales. Anadio que es preferible abrir el debate antes que imponer cambios sin discusion democratica.
El analista y consultor en comunicacion politica Carlos Saavedra opina que la postura del Gobierno a favor de los intereses agroempresariales responde a la necesidad de obtener divisas con rapidez. Planteo que la negociacion podria incluir garantias para que los sectores repatrien capitales a cambio de seguridad juridica.
El sector agroindustrial en Bolivia disfruta ya de beneficios que no forman parte de la discusion actual, como la subvencion del diesel, la exencion de aranceles para la importacion de maquinaria agricola y un regimen tributario muy bajo: segun la ultima actualizacion del Regimen Agropecuario Unificado (RAU), pagan entre 0,40 y 19 dolares anuales por hectarea, al tipo de cambio oficial.
La agricultura boliviana se concentra en cultivos como soya, cana de azucar, sorgo, maiz y papa, con el departamento de Santa Cruz como principal polo productivo. Aunque el sector aumento su volumen en anos recientes, enfrenta problemas crecientes por sequias recurrentes, escasez del diesel subvencionado y variaciones climaticas que afectan los rendimientos.
Ademas, el modelo productivo acarrea costos ambientales, entre ellos la deforestacion y la presion sobre ecosistemas, lo que genera tensiones entre el crecimiento productivo y la sostenibilidad.
“El pais esta entregando sus tierras y el sector esta dinamizando la economia; todo eso es encomiable, pero en otros paises los sectores dinamicos suelen contribuir con impuestos razonables y ese es un debate que deberia abrirse, especialmente ahora que hay una necesidad tan grande en Bolivia”, senalo Requena.
En un contexto marcado por urgencias economicas y expectativas cruzadas, el avance de las propuestas agroindustriales pondra a prueba la capacidad del nuevo Gobierno para equilibrar intereses sectoriales con el bienestar colectivo. El desafio sera mantener un debate abierto y asegurar que cualquier cambio normativo responda no solo a la coyuntura, sino al interes publico en el mediano y largo plazo.


