Un apagón masivo afectó la mitad occidental de Cuba este miércoles, dejando sin electricidad a alrededor de 3,5 millones de personas, incluida La Habana, informó el Ministerio de Energía y Minas (Minem).
El Sistema Eléctrico Nacional (SEN) registró la falla hacia las 05:00 hora local (09:00 GMT). Las autoridades no han precisado las causas. En días previos se habían reportado déficits récord en la generación eléctrica que ya ocasionaban apagones diarios prolongados.
Las provincias afectadas son Pinar del Río, La Habana, Artemisa y Mayabeque.
El lunes, el 59% del territorio nacional sufrió apagones simultáneos por el déficit de generación, la mayor tasa registrada hasta ahora.
Desde mediados de 2024, Cuba enfrenta una crisis energética por averías recurrentes en sus centrales termoeléctricas y la falta de divisas para comprar el combustible necesario para las plantas de fueloil y diésel.
En el último año, el SEN registró cinco colapsos totales —con recuperaciones que en ocasiones demoraron días— y varios colapsos parciales, el último en octubre.
Ese episodio fue atribuido por la Unión Eléctrica (UNE) a una “oscilación” que provocó una desconexión parcial; el servicio se restableció tres horas después y las autoridades no ofrecieron más explicaciones.
La crisis ha generado cortes de electricidad de hasta 20 horas o más al día en varias regiones del país.
Expertos independientes señalan que la causa principal es una “infrafinanciación crónica” del sector, gestionado por el Estado desde 1959. Estudios estiman que la recuperación del sistema requeriría entre 8.000 y 10.000 millones de dólares.
El gobierno cubano atribuye la situación a sanciones que, según afirma, provocan una “asfixia energética”, y también reconoce una reducción en los suministros de combustible por parte de Rusia, Venezuela y México.
Los cortes diarios afectan la economía —que ha caído un 11% en los últimos cinco años y apunta a cerrar nuevamente el año en negativo— y contribuyen al descontento social en un contexto de grave crisis.


