Iran atraviesa la peor crisis hidrica en decadas: una sequia que pone en riesgo la habitabilidad de Teheran, una metropoli de mas de 10 millones de personas y el principal centro politico y economico del pais. Las autoridades advierten que, si no se registran lluvias antes de diciembre, podria ser necesario racionar el agua e incluso evacuar la ciudad si la situacion no mejora.
El presidente Masoud Pezeshkian advirtio que la capital podria quedarse sin agua si las precipitaciones no llegan en las proximas semanas. “Tendremos que racionar el agua en Teheran. Y si tampoco llueve despues, no quedara agua y habra que evacuar la ciudad”, afirmo.
La escasez se agravo tras un verano extremadamente calido y es el resultado tanto de factores climaticos como de decadas de gestion inadecuada de recursos. Doce grandes represas del pais estan por debajo del 10% de su capacidad, y las reservas de los embalses que abastecen a Teheran han caido a niveles no vistos en sesenta anos.
Segun la Compania de Agua y Alcantarillado de Teheran (Abfa), la disponibilidad de agua apenas alcanza el 5%. El director de la entidad, Mohsen Ardekani, describio la situacion como “critica y de alto riesgo” para las reservas hidricas de la ciudad, en declaraciones al Club de Periodistas Jovenes.
La crisis no se limita a la capital. En Mashhad, la segunda ciudad mas grande de Iran y un importante centro religioso chiita, el director ejecutivo de la compania local de agua, Hossein Esmaeilian, dijo a la agencia ISNA que los embalses que abastecen a sus alrededor de cuatro millones de habitantes estan poco por encima del 3% de su capacidad, lo que obliga a gestionar el agua con estricta racionalidad.
Expertos y criticos consultados por medios estatales senalan que las causas exceden la falta de lluvias: la construccion excesiva de represas, la perforacion de pozos ilegales y practicas agricolas ineficientes han contribuido al agotamiento de las reservas. El gobierno de Pezeshkian atribuye la crisis a “politicas de gobiernos anteriores, el cambio climatico y el consumo excesivo”, segun Reuters.
Las restricciones ya repercuten en la vida cotidiana. Aunque las autoridades niegan un racionamiento formal, la Compania Nacional del Agua y Alcantarillado confirmo reducciones de presion en horas nocturnas en Teheran y advirtio que algunos barrios pueden quedarse sin suministro durante varias horas, segun residentes entrevistados por Reuters. En la capital, siete de cada diez habitantes consumen mas del estandar de 130 litros diarios. A nivel nacional, el 92% de los recursos hidricos renovables se agota cada ano y el 85% del agua se destina al sector agricola, muy por encima de los niveles sostenibles recomendados internacionalmente.
Los efectos ambientales son visibles en amplias zonas: hundimientos del terreno en llanuras, perdida de ecosistemas y la desaparicion de lagos y humedales, lo que ha incrementado la frecuencia de tormentas de polvo, segun la Organizacion para la Proteccion del Medio Ambiente.
La respuesta oficial incluye la reduccion de presion, el traslado de agua desde otras cuencas y campanas para que la poblacion instale tanques de almacenamiento y reduzca su consumo. Sin embargo, medios como Shargh y Etemad recogen criticas que consideran insuficientes estas medidas y denuncian la politizacion de la gestion ambiental y la designacion de responsables “no cualificados”.
Mientras tanto, el temor y la incertidumbre se extienden en el dia a dia. Habitantes de Teheran, Mashhad y otras cincuenta ciudades reportan cortes y falta de prevision ante interrupciones imprevistas. Una residente de Teheran, citada por EFE, resumio la preocupacion general: “Todos hablamos del miedo a que la ciudad quede sin agua, seria desastroso. Sin agua es imposible vivir”.
(Con informacion de AFP, EFE y Reuters)
