La boda entre Marianela Mirra y Jose Alperovich, prevista como una ceremonia intima en el departamento del exgobernador en Puerto Madero, fue suspendida a ultimo momento. Lo que iba a ser un acto discreto con alrededor de 20 invitados y un servicio de catering -segun trascendio, con un costo estimado por invitado- se cancelo porque Alperovich temio que la reunion pudiera ser interpretada por la Justicia como un incumplimiento de las condiciones de su arresto domiciliario.
Segun allegados, los invitados fueron notificados por WhatsApp con un mensaje pidiendoles que no concurrieran. La pareja planea igualmente realizar el tramite civil, pero con la mayor austeridad posible.
El contexto legal fue determinante: Jose Alperovich cumple prision domiciliaria por una condena por abuso sexual y permanece bajo estrictas condiciones, entre las que se cuentan una tobillera electronica, el pago de una caucion de 400 millones de pesos, la prohibicion de contacto con la denunciante y su entorno, y limitaciones severas a su movilidad dentro del edificio. Estas restricciones llevaron a que se priorizara la prudencia y se optara por suspender la celebracion social, pese a que Mirra habia anunciado anteriormente su intencion de casarse.


