Club Atlético Monte Grande busca ascender en vóley
El Club Atlético Monte Grande se encuentra ante la posibilidad de lograr su segundo ascenso consecutivo en las divisiones juveniles de vóley, una circunstancia que, de concretarse, representaría un hito para Esteban Echeverría: sería el primer ascenso para el distrito en esta categoría. La posibilidad despierta expectativas entre jugadores, cuerpo técnico y la comunidad que sigue de cerca el desempeño del club.
Los juveniles viven la previa con intensidad y compromiso. Un integrante del equipo Sub 15 relativiza la dificultad del encuentro pero destaca la preparación: “No voy a decir que es un partido fácil, porque fácil no hay ninguno, pero es ganable. Estamos entrenando un montón”. Ese enfoque refleja la confianza que nace del trabajo cotidiano y de las sesiones de entrenamiento prolongadas que, según los jugadores, han fortalecido tanto la técnica como la cohesión grupal.
En la categoría Sub 16 la expectativa también es alta. Uno de los protagonistas señala la mejora del equipo y la convicción de que el ascenso es posible: “Para mí el equipo mejoró muchísimo. Creo que en nuestro partido vamos a ascender”. La ansiedad y la ilusión se mezclan en las declaraciones de los juveniles: “Me pone nervioso, quiero que llegue ese día para festejar con toda la emoción”. Esa mezcla de nervios y deseo de celebrar indica que, además del aspecto competitivo, el logro tendría un fuerte componente emocional para los integrantes del plantel.
El cuerpo técnico observa además un efecto contagio positivo entre las categorías. El entrenador destacó que la conducta comprometida de los mayores incentivó a los más chicos a sumarse con mayor constancia a los entrenamientos, lo que se tradujo en un cambio notable en los resultados: “Sub 14 no había ganado casi ningún partido. Viendo que los mayores se comprometieron más, empezaron a entrenar con ellos y desde septiembre ganaron casi todo. Nos salvaron”. Este testimonio sugiere que la dinámica interna del club —liderazgo, ejemplo y trabajo compartido— está influyendo en la mejora general.
Más allá del resultado inmediato, la posibilidad del ascenso supone beneficios para el proyecto deportivo del club: mayor visibilidad, estímulo para la continuidad de los procesos de formación y un impulso para que más chicos y chicas se involucren en la actividad. La comunidad local también podría experimentar un sentimiento de orgullo y pertenencia si Monte Grande logra consolidarse en una categoría superior. En definitiva, la combinación de esfuerzo, compromiso y cohesión interna define la antesala de un encuentro que podría marcar un punto de inflexión en la trayectoria del club.


