El Ejercito israeli acuso este martes a la milicia libanesa Hezbollah de intentar reconstruir sus capacidades de combate en el sur del Libano, una accion que, segun Israel, vuelve a amenazar su seguridad y pone en riesgo el acuerdo de alto el fuego alcanzado el ano pasado.
El portavoz militar israeli, Nadav Shoshani, afirmo que la milicia chiita, respaldada por Iran, opera al sur del rio Litani en violacion de los compromisos asumidos, por lo que las fuerzas israelies han intensificado los ataques contra objetivos del grupo en esa zona.
En una rueda de prensa el martes, Shoshani dijo que Hezbollah estaria intentando introducir armamento de contrabando en Libano desde Siria y por otras rutas alternativas. “Trabajamos para impedirlo y para bloquear las rutas terrestres desde Siria hacia Libano con un alto grado de exito, pero siguen representando una amenaza”, senalo.
El vocero enfatizo que Israel se mantiene comprometido con el acuerdo, pero exige que sea respetado. “No volveremos a la realidad del 7 de octubre de 2023, con una amenaza de miles de combatientes en nuestra frontera cerca de civiles”, subrayo.
Desde el lado libanes, Hezbollah nego las acusaciones y afirmo que no esta reconstruyendo capacidades militares en el sur y que sigue comprometido con el alto el fuego de 2024. El grupo indico que no ha abierto fuego contra Israel desde la entrada en vigor de la tregua, y funcionarios de seguridad libaneses dijeron a Reuters que no han impedido las operaciones del Ejercito libanes para localizar y confiscar armamento en el sur.
No obstante, Hezbollah rechaza pedidos de desarme total, mientras que, segun fuentes libanesas e israelies, Israel presiona a las Fuerzas Armadas libanesas para que intensifiquen el desarme del grupo, incluyendo registros domiciliarios en busca de armas.
En respuesta a la ofensiva israeli, el secretario general de Hezbollah, Naim Qasem, critico publicamente los bombardeos en territorio libanes. En un discurso televisado afirmo que “no hay alternativa al acuerdo” y advirtio que la ofensiva “no podra ser tolerada por mucho mas tiempo”.
Qasem tambien responsabilizo a Estados Unidos, a la que acuso de interferir en “los asuntos politicos, militares y economicos del Libano”, segun la emisora libanesa Al Manar. Dijo que Washington busca limitar la capacidad de resistencia libanesa y armar al ejercito nacional solo hasta un punto en que no pueda hacer frente a una posible agresion israeli, lo que dejaria al pais expuesto.
En los ultimos dias, una delegacion del Departamento del Tesoro de Estados Unidos, encabezada por el subdirector de contraterrorismo John Hurley, insto al gobierno libanes a tomar medidas para cortar el financiamiento irani a Hezbollah. Washington estima que Iran ha transferido mas de 1.000 millones de dolares al grupo desde enero, segun AFP. Funcionarios estadounidenses enviaron un mensaje “claro y firme” sobre la necesidad de combatir las fuentes de ingresos de Hezbollah, mientras la administracion de Donald Trump insiste en el desarme del movimiento y en la desarticulacion de su financiacion.
En este contexto, Hezbollah ha perdido peso politico tras cambios en su liderazgo y por el deterioro parcial de su estructura militar durante el ultimo conflicto con Israel. Aun asi, Qasem reitero que no entregaran su arsenal al ejercito libanes y defendio el derecho del grupo a mantener armamento como instrumento de fuerza y disuasion.
Qasem se mostro dispuesto a un dialogo nacional para definir la estrategia de defensa futura, pero condiciono esa negociacion al respeto por parte de Israel del alto el fuego. Rechazo la intervencion de potencias extranjeras en esas conversaciones y descarto, por ahora, negociaciones directas con Israel, una opcion que el presidente libanes Joseph Aoun habria planteado bajo presion de Washington.
(Con informacion de AFP, AP, EFE, EP y Reuters)


