Las granjas podrian convertirse en aliadas clave contra el cambio climatico, segun un estudio liderado por la Universidad Tecnologica de Queensland (QUT) y publicado en Plant Physiology.
Realizado en colaboracion con la Universidad de California Davis y otras instituciones, el trabajo propone un marco cuantitativo para evaluar intervenciones agricolas -incluida la biologia sintetica- con el objetivo de reducir emisiones de gases de efecto invernadero y aumentar el secuestro de carbono en sistemas productivos.
Agricultura y ciclo global del carbono: doble rol estrategico
La agricultura aporta cerca del 12,5% de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero, pero tambien participa en la absorcion de carbono: las tierras agricolas capturan mas de 115 gigatoneladas de CO al ano por fotosintesis. Esto convierte al sector en un punto estrategico tanto para reducir emisiones como para aumentar el almacenamiento de carbono.
Mejoras incluso modestas en la captura, uso y almacenamiento del carbono en cultivos pueden generar beneficios climaticos significativos, senala la profesora Claudia Vickers (QUT). Entre las principales fuentes de emisiones agricolas estan los fertilizantes nitrogenados sinteticos y la quema de residuos; ademas, la degradacion del suelo y la perdida de vegetacion nativa reducen la capacidad de absorcion de CO, lo que subraya la necesidad de acciones en el sector.
Un marco comparativo para mitigar emisiones
El estudio presenta un metodo para comparar objetivamente estrategias de mitigacion agricola, evaluando la cantidad de carbono capturada por hectarea junto con criterios como escalabilidad, durabilidad del almacenamiento, viabilidad tecnica y adecuacion socioeconomica. Tambien se considera el balance de emisiones en todo el ciclo de vida y la aplicabilidad en condiciones reales.
Esta evaluacion integral ayuda a priorizar soluciones prometedoras y a evitar consecuencias no deseadas, como la exclusion de pequenos agricultores o incrementos de emisiones indirectas.
Reduccion de fertilizantes, biochar, reforestacion y biologia sintetica: principales estrategias
Reducir el uso de fertilizantes nitrogenados sinteticos aparece como una de las medidas de mayor impacto inmediato y escalable, con potencial para mitigar emisiones a nivel de gigatoneladas. Disminuir la dependencia del proceso Haber-Bosch reduciria tanto CO como oxidos de nitrogeno (NO), potentes gases de efecto invernadero.
El biochar -carbon vegetal derivado de residuos agricolas- ofrece almacenamiento duradero de carbono en suelos y beneficios adicionales en fertilidad y retencion de agua. La reforestacion y el cultivo de especies de rapido crecimiento como el Miscanthus pueden secuestrar grandes cantidades de carbono, aunque requieren extensas superficies y plantean desafios sobre la durabilidad del almacenamiento y la competencia por uso del suelo.
La biologia sintetica permite hoy modificar cultivos para mejorar la fijacion de carbono, la eficiencia fotosintetica y la resistencia a plagas. A largo plazo, el estudio estima que estas tecnologias podrian representar una reduccion acumulada equivalente a 260 gigatoneladas de CO en el proximo siglo, si bien su escalabilidad y viabilidad dependen de avances tecnicos, marcos regulatorios y aceptacion social.
Potencial global y por hectarea: estimaciones cuantitativas
La captura de carbono por hectarea varia ampliamente entre estrategias, desde menos de una hasta mas de 30 toneladas de CO equivalente por hectarea y ano. Por ejemplo, el cultivo de Miscanthus podria alcanzar hasta 37 toneladas de CO equivalente por hectarea y ano. En terminos globales, la reforestacion y el uso de biochar pueden contribuir aproximadamente con 1,7 y 1 gigatonelada de CO al ano, respectivamente.
Otras medidas de impacto a corto plazo incluyen la reduccion de emisiones de metano en arrozales y la conversion de residuos agricolas en biochar. Una reduccion del 30% en las emisiones de metano del arroz podria equivaler a cerca de 81 gigatoneladas de CO equivalente en un horizonte de 100 anos.
Hacia una combinacion de soluciones para la agricultura climaticamente inteligente
No existe una solucion unica que cumpla todos los objetivos; se necesita una cartera de intervenciones que combine estrategias maduras -como la reduccion de fertilizantes y el uso de biochar- con innovaciones en desarrollo, como la biologia sintetica aplicada a cultivos y microbiomas. Esta mezcla permite responder a retos inmediatos y preparar soluciones a largo plazo, diversificando riesgos y maximizando beneficios climaticos.
Las medidas efectivas deben ser tecnicamente viables, economicamente rentables, duraderas y escalables, y provocar el menor dano posible a los ecosistemas. La adaptacion local es esencial: cada region debe implementar intervenciones acordes a sus condiciones ambientales, recursos y prioridades socioeconomicas.
Mejorar el secuestro de carbono en la agricultura no solo ayuda a mitigar el cambio climatico, sino que tambien puede reforzar la seguridad alimentaria, aumentar los ingresos de los agricultores y mejorar la sostenibilidad productiva mediante mayor productividad, resistencia a plagas y mejor calidad de suelos. Estas sinergias sociales, ambientales y economicas hacen que las soluciones agricolas sean especialmente relevantes para politicas publicas y desarrollo rural.


