El creciente interes por los coleccionables de diseno esta generando nuevas alianzas y retos en la industria global del entretenimiento. Labubu, un personaje reconocido por su aspecto travieso y expresivo, destaca por su pelaje mullido, orejas largas y una sonrisa caracteristica.
Nacido como una pieza especial en el arte urbano de Asia, Labubu se incorporo pronto al circuito de figuras de coleccion y se convirtio en un objeto de culto entre publicos jovenes y adultos.
Con multiples variantes, Labubu se ha consolidado en la cultura pop y es un referente para quienes buscan piezas exclusivas en el mercado del toy design.
Labubu podria dar el salto al cine: Sony Pictures compro los derechos cinematograficos del personaje y esta en las primeras fases de desarrollo de una pelicula que, de tener exito, podria abrir la puerta a una franquicia.
El acuerdo, informado inicialmente por The Hollywood Reporter, fue firmado recientemente entre los fabricantes de juguetes chinos y Sony Pictures, cuya division de animacion viene de obtener un exito global con K-Pop Demon Hunters. Aun no se ha nombrado productor ni director, ni se ha confirmado si el proyecto sera accion real o animacion.
Las figuras fueron disenadas por el artista europeo Kasing Lung y salieron al mercado como parte de una linea de monstruos de la compania How2 Work, ganando gran popularidad en el sudeste asiatico en 2019 tras su impulso por Pop Mart.
Segun Lung, su inspiracion incluye cuentos nordicos, influencia que surgio tras trasladarse de Hong Kong a los Paises Bajos en su infancia. La difusion en redes sociales, los videos de unboxing y la adopcion por parte de celebridades han amplificado su popularidad.
Artistas como Lisa, integrante del grupo de K-Pop Blackpink, contribuyeron a elevar la tendencia al incorporar las munecas a sus accesorios, mientras que figuras publicas como Rihanna y Emma Roberts han reforzado la percepcion de Labubu como un objeto de estatus.
Los lanzamientos de nuevas ediciones en Pop Mart se agotan en minutos; el ano pasado la empresa registro un aumento de ingresos del 350 %. Las ediciones limitadas han alcanzado precios de seis cifras en subastas, dentro de un mercado secundario muy competitivo.
El universo de pantalla propuesto incluye a Labubu, el muneco monstruo principal, asi como personajes como Zimomo, Mokoko y Tycoco. Una pelicula centrada en Labubu ejemplificaria la tendencia reciente de Hollywood: en lugar de que las peliculas inspiren juguetes, ahora son los juguetes los que generan proyectos cinematograficos.
El exito de Barbie, que recaudo mas de mil millones de dolares en 2023, impulso una ola de adaptaciones de productos de jugueteria. Mattel llego a considerar adaptar decenas de sus marcas, incluidos Hot Wheels, He-Man y Polly Pocket. Esta semana, Sony y Mattel tambien anunciaron una colaboracion para llevar al cine el clasico View-Master.
Mercado global y modelo de negocio de Pop Mart
El impacto de Labubu en el mercado de coleccionables es evidente: una escultura de mas de 1,20 metros se vendio en subasta en Pekin por mas de USD 150.000, demostrando el interes internacional. El modelo de negocio de Pop Mart, fundada por Wang Ning en 2010 tras inspirarse en las maquinas gashapon de Hong Kong, se apoya en la exclusividad, la escasez y las colaboraciones con artistas.
La empresa salio a bolsa en Hong Kong en 2020 y llego a alcanzar una capitalizacion de USD 56.000 millones; la fortuna de su fundadora llego a estimarse en USD 27.500 millones. En el primer semestre de 2025, Pop Mart triplico su facturacion y su beneficio crecio un 396,5 % interanual, superando los USD 637 millones.
La demanda es tan alta que los mini-Labubu se venden en minutos en plataformas como WeChat y Tmall, y la reventa en sitios como StockX puede duplicar o triplicar el precio original, alcanzando hasta USD 310 por una caja de seis unidades.
Dilemas legales y derechos de autor
La popularidad de Labubu ha generado debates sobre derechos de autor y propiedad intelectual. Expertos legales advierten sobre los riesgos de considerar estas piezas como activos de inversion artistica sin las debidas precauciones.
Una abogada consultada recomienda no tratar a Labubu como un activo artistico garantizado, pues se trata de una tendencia cuya demanda puede descender. Si se decide invertir en estas piezas, aconseja recurrir a tasadores especializados y llevar un inventario detallado.
En terminos de proteccion legal, la expresion artistica de los munecos Labubu puede protegerse mediante el registro de derechos de autor, lo que permite al titular emprender acciones por copia no autorizada o la creacion de obras derivadas. Los contratos entre marcas y creadores suelen incluir la cesion de derechos o, como alternativa, licencias globales y perpetuas. Ademas, la personalizacion y la exhibicion en redes sociales plantean nuevos retos, ya que la publicacion de imagenes de munecos personalizados puede requerir el permiso del titular de los derechos.
El futuro de Labubu apunta hacia la consolidacion de una franquicia global, impulsada por la alianza con Sony Pictures y por una comunidad internacional de coleccionistas. No obstante, los especialistas insisten en la cautela: quienes invierten en estos objetos deben documentar y tasar sus piezas, conscientes de que el valor de los coleccionables puede variar con rapidez.
