Hay una figura legendaria del cine en espanol que, sentada en la terraza de un moderno edificio en el barrio de Palermo, pregunta con desenfado si puede fumar. No espera una respuesta: enciende un cigarrillo fino y, casi buscando una excusa para el habito que no le agrada, comenta que “como no me gustan, los apago pronto… Pero vamos, cada vez estoy fumando menos”.
Se trata de Carmen Maura, una de las actrices espanolas mas reconocidas de las ultimas decadas y, en cierto modo, el prototipo de la “chica Almodovar” que Joaquin Sabina evoco en su cancion. Hoy tiene 80 anos y conserva la inteligencia y la agudeza: le gusta conversar, es ironica y establece rapido una complicidad con quien la entrevista.
La charla parte de ese cigarrillo en una terraza y se desplaza a epocas en que se fumaba en aviones, para pasar luego a la posible prohibicion de fumar en las terrazas en Espana y, desde alli, a recordar la agonia de Franco y los cambios sociales de hace cincuenta anos. Todo surge al evocar un tiempo en el que fumar estaba presente en todas partes.
-Siente nostalgia de ese mundo?
-Si, pero no por el tabaco. A veces echo de menos los anos ochenta y la sensacion de libertad que habia. Fue muy curioso vivir la muerte de Franco y el cambio tan brusco que vino despues.
-Se estan por cumplir 50 anos de aquello.
-Si, me encanta haberlo vivido. Fue un momento lleno de buena voluntad. Todo el mundo parecia estar pendiente de su muerte… (risas). Teniamos la sensacion de que iba a pasar en cualquier momento: la television estuvo transmitiendo el funeral continuamente, la gente pasaba por la calle con distintas reacciones. Y en muy poco tiempo se noto un cambio cultural: los bares, las calles y los kioscos se llenaron de imagenes explicitas; en el teatro, incluso se pagaba mas por espectaculos mas atrevidos. Fue un descontrol divertido, por decirlo de alguna manera.
Carmen Maura visito Buenos Aires para cumplir con las actividades promocionales del estreno de Vieja loca, pelicula escrita y dirigida por Martin Mauregui, producida por J. A. Bayona y con el uruguayo Daniel Hendler como coprotagonista. En terminos sencillos, es una pelicula de terror que tiene como eje a una anciana extremadamente cruel y capaz de acciones extremas.
-Habia hecho alguna vez un papel de mujer tan mala?
-No. He interpretado personajes malvados, pero no con esa magnitud. Esta senora esta realmente loca y realiza cosas que yo no habia interpretado antes. Cuando vi la pelicula me sorprendi mucho. Durante el rodaje, ademas, no suelo mirar imagenes ni fotos mias ni mirarme al espejo; menos mal que no lo hice, porque me habria asustado (risas).
-Para un personaje asi, tuvo que cambiar su tecnica actoral?
-No, fue lo mismo de siempre: aprender el texto muy bien y comprender exactamente lo que quiere el director. Para mi eso es fundamental, y cuanto mas complejo es el papel, mas importante es entender la vision del director, porque es su pelicula. Lo respeto mucho. Yo no seria directora; me parece un trabajo complicado: tienen que buscar financiacion, resolver problemas de produccion, lidiar con muchas preguntas… Defenderia al director, porque dirigir es muy incomodo en muchos aspectos.
-Nunca tuvo la tentacion de dirigir?
-No, ni loca. Ser actriz es comodo en el sentido de que te ponen todo: unicamente te ocupas de tu personaje. Me gusta que mi trabajo este claramente delimitado. Ademas, te cuidan mucho en el set, y siendo mayor eso se acentua. Cuando llego al rodaje, digo: “Tengo ochenta anos”. Les pregunto por la edad de sus madres o abuelas para que entiendan que deben tener cuidado; les advierto: “No me puedo caer, porque si te caes, te rompes”. Es una forma de pedir que cuiden a la actriz mayor en el set (risas).
Maria del Carmen Garcia y Maura nacio el 15 de septiembre de 1945, poco despues del fin de la Segunda Guerra Mundial. Crecio en una familia acomodada en un barrio de clase media alta de Madrid y, desde joven, tomo su propio camino hasta convertirse en una de las figuras emblematicas del cine espanol.
En esa trayectoria tuvo un papel clave Pedro Almodovar: se conocieron durante una obra en la que ella era la protagonista y el participaba en un papel secundario. Almodovar destaco pronto como director mas que como actor y comenzaron a colaborar: primero en cortometrajes y luego, en 1980, en Pepi, Luci, Bom y otras chicas del monton. Ambos formaron parte de la Movida madrilena de los anos ochenta, aportando creatividad a ese movimiento cultural, por lo que mencionarlo resulta inevitable.
-No voy a ser original al respecto, entonces: le cansa un poco que le pregunten por Almodovar?
-No me molesta.
-Y como recuerda la experiencia de haber trabajado con el?
-Fue fantastica, muy positiva.
-Cuando filmo con usted el no era una estrella mundial como ahora.
-No, en aquel momento no era nadie famoso. Yo ya tenia cierto reconocimiento por mi trabajo en el Teatro Nacional, pero el no. En la obra que compartimos hacia papeles pequenos; me parecio muy simpatico y nos hicimos amigos. Despues vinieron los cortometrajes y la idea de convertir Pepi en una pelicula mas larga: lo propuse y decidimos ampliarla.
-Lo sigue viendo? Se lo cruza alguna vez?
-Cuando nos cruzamos, todo bien, con normalidad. No tenemos una relacion constante: el tiene su vida y yo la mia. Ambos reconocemos que nos ayudamos al principio y lo pasamos bien trabajando juntos. A partir de ahi cada cual siguio su camino. Ademas, muchas actrices desean trabajar con Almodovar, asi que adelante para quienes quieran hacerlo.
-Por que cree que tantas actrices quieren trabajar con el?
-No estoy segura. Al principio, cuando yo hacia comedia, pensaba que algunas creian que trabajar con el les haria ganar gracia, pero eso no es asi. El es muy ingenioso, pero eso no garantiza que cualquiera que trabaje con el se vuelva graciosa.
-Cree que el interpreta el alma femenina de una manera especial?
-Si, le interesan mucho las mujeres. Al principio congeniamos porque a el le gustaba escuchar mis historias; yo tenia muchos problemas entonces y soliamos hablar mucho. Me acompanaba a casa y se inventaba historias; yo le pedia que imaginara papeles para mi. Tenia una imaginacion enorme. A el le guste como actriz y a mi me gusto su trabajo como director.
-De todo esto que cuenta, nunca se sintio tentada de escribir sus memorias?
-Me lo han pedido muchas veces, pero no. Ademas del trabajo de escribir, luego hay que vender el libro, hacer presentaciones y recorrer pueblos para firmar ejemplares, y eso no lo quiero hacer (risas).
-Suficiente con las peliculas.
-Solo con pensarlo me pongo nerviosa. No puedo. Me lo han pedido muchas veces porque me han pasado muchas cosas y no escribiria mal, pero no quiero la parte de promocion. Prefiero que la gente ya sepa mi historia.
-En el Retiro, en la feria, con tanto calor, podria firmar?
-No, no quiero. Ya esta todo contado, y no deseo dedicar mi tiempo a eso.


