Alemania instaló este miércoles el sistema de defensa antimisiles Arrow, convirtiéndose en el primer país europeo en desplegarlo. El sistema, desarrollado por Israel Aerospace Industries (IAI) junto a la Agencia de Defensa de Misiles de Estados Unidos, fue activado en una ceremonia en la base aérea de Holzdorf, a unos 100 kilómetros al sur de Berlín, con el objetivo de enfrentar la creciente amenaza de misiles balísticos procedentes de Rusia.
Es la primera vez que Arrow se utiliza fuera de Israel y su incorporación forma parte de la respuesta europea ante la posibilidad de lanzamientos de proyectiles de alcance intermedio en un conflicto.
Diseñado para interceptar misiles balísticos de largo alcance —incluido el ruso Oreshnik—, Arrow opera a altitudes superiores a los 100 kilómetros y alcanza hasta 2.400 kilómetros. Alemania adquirió el sistema en 2023 por 3.600 millones de euros (unos 4.180 millones de dólares), financiación que proviene de un fondo extraordinario creado tras la invasión rusa de Ucrania para modernizar las Fuerzas Armadas y cubrir una carencia crítica en la defensa territorial.
El ministro de Defensa, Boris Pistorius, afirmó que, por primera vez, Alemania tendrá “capacidad de alerta temprana y defensa contra misiles balísticos de largo alcance para nuestra población e infraestructura”. Subrayó el valor estratégico de la compra para consolidar “el papel central de Alemania en el corazón de Europa”, reforzar el pilar europeo de la OTAN y cumplir objetivos de planificación de la Alianza.
En el acto participaron altos cargos del Ministerio de Defensa israelí y representantes de la industria. El embajador israelí en Berlín, Ron Prosor, afirmó: “¿Quién hubiera imaginado que, solo 80 años después de la liberación de Auschwitz, el Estado judío, gracias a las tecnologías que desarrolla, ayudaría a defender no solo a Alemania, sino a toda Europa?”.
Arrow complementa las defensas aéreas ya desplegadas en Alemania, como los Patriot estadounidenses y los sistemas IRIS-T nacionales, orientados a amenazas de menor alcance. El sistema puede detectar e interceptar misiles lanzados desde tierra, aire o mar a distancias superiores a 1.000 kilómetros, y se considera un refuerzo frente a amenazas como los misiles Iskander desplegados por Rusia en Kaliningrado, situados a unos 500 kilómetros de Berlín.
Varios países han mostrado interés en adquirir Arrow, especialmente tras su uso en la defensa de Israel frente a ataques de misiles iraníes en abril y octubre de 2024, según IAI. El sistema incluye un centro de control, radares y dispositivos de intercepción operados desde distintas ubicaciones. Alemania planea cubrir todo su territorio con instalaciones en tres puntos principales —norte, sur y centro— y espera que la defensa esté plenamente operativa en 2030.
El despliegue de Arrow forma parte del European Sky Shield Initiative (ESSI), liderado por Alemania y al que ya se han sumado otros 23 países. La iniciativa surgió tras la invasión de 2022, que evidenció vulnerabilidades en la defensa aérea europea y la necesidad de una mayor coordinación dentro de la OTAN. Con esta estrategia, Berlín pretende consolidarse como un centro logístico y de defensa en Europa, pese al desplazamiento de las líneas de confrontación hacia el este, que afecta a Polonia y a los países bálticos.
El Ministerio de Defensa sostiene que, con la entrega y el despliegue de Arrow, Alemania contará pronto con una cobertura capaz de proteger a la población y a la infraestructura crítica durante todo el año. “Reforzamos la responsabilidad de Alemania y damos una señal clara de asociación y compromiso dentro de Europa y la OTAN”, declaró Pistorius. El contrato de Arrow representa el mayor acuerdo de exportación militar para Israel y su integración en la arquitectura defensiva será gradual, con el objetivo de ofrecer una respuesta coordinada ante eventuales ataques de misiles balísticos hacia territorio europeo.
(Con información de AFP, EFE y Reuters)


